El nuevo tendido eléctrico de El Chañar estará listo en enero

Sobisch habilitó la obra de media tensión desde Planicie Banderita que construyó el EPEN, pero falta terminar la de baja tensión para el sistema de riego. En el acuerdo original, el compromiso de los propietarios de las explotaciones fue encargarse de la red de baja tensión.

NEUQUEN (AN).- El tendido eléctrico entre Planicie Banderita y El Chañar III Etapa, que fue inaugurado con bombos y platillos en julio pasado por el gobernador Jorge Sobisch, todavía no abastece de energía al complejo agroindustrial donde se cultivan frutales y vides y funcionan bodegas que producen vinos finos. El compromiso del Ente Provincial de Energía -EPEN- fue llevar las líneas de media tensión hasta la ruta, y los propietarios de las explotaciones se encargarían de la red de baja tensión para alimentar los sistemas de riego.

Ayer, el titular del consorcio La Inversora, Julio Viola, dijo que las obras están en marcha -"ya empezamos en parte de las picadas 12 y 14"- y anunció que en enero próximo, "cuando la demanda se mayor, la red estará en pleno funcionamiento" Viola, cabeza visible de los proyectos de inversión en El Chañar III Etapa y propietario de Bodegas del Fin del Mundo, anticipó que en esa fecha "llegaremos a la picada 9, a todas las centrales de bombeo", aunque omitió informar sobre el costo de la inversión total en la obra en cuestión. De esa manera, "se descomprimirá la demanda de energía" y se garantizará el riego en todas las parcelas.

Actualmente, indicó, "tenemos 50 kilómetros en redes de energía eléctrica que construimos nosotros".

A mediados de julio pasado, durante una jornada de trabajo en esa zona, el gobernador Sobisch inauguró la obra realizada por el EPEN con un presupuesto de 662 mil pesos. La línea de media tensión recorre 24 kilómetros entre Planicie Banderita y la intersección de las rutas provinciales 7 y 8 en un trazado que transcurre en forma paralela a la ruta 15, con cruces especiales en la central hidroeléctrica Cerros Colorados y en el río Neuquén en inmediaciones del dique compensador de El Chañar.

En esa zona se generó un polo productivo agroindustrial con cultivos de frutales de pepita y carozo y últimamente la incorporación de miles de hectáreas de viñedos. La vertiente vitivinícola culminó este año con la puesta en funcionamiento de la elaboración de vinos finos a escala industrial -con la empresa Bodegas del Fin del Mundo-. Allí hay más de tres mil hectáreas con emprendimientos que fueron financiados con líneas crediticias del Banco Provincia del Neuquén que después se transfirieron al Instituto Autárquico de Desarrollo Productivo, Iadep.