Jueves 4 de setiembre de 2003

La ciclovía llevará seguridad a Ciudad Industrial

El municipio neuquino empezó a pavimentar un camino de dos kilómetros para bicicletas y motos de bajas cilindradas, un antiguo reclamo de los vecinos. Unirá el centro de la ciudad con el barrio.

 

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El inicio de los trabajos pone fin a los reclamos de miles de personas que todos los días transitan por peligrosos caminos.

NEUQUEN (AN).- El desandar de las pesadas maquinarias en el sector de acceso a Ciudad Industrial delata el inicio de la construcción de la ciclovía para bicicletas y motos de baja cilindrada, un antiguo reclamo de los pobladores del barrio que recorren todos los días la peligrosa ruta.

En esta primera etapa, la municipalidad pavimentará un camino de tres metros de ancho y dos kilómetros de extensión, hasta la altura del puente vial.

Esta mini-ruta estará demarcada con petriles altos con la finalidad de evitar que los autos la tomen por asalto y la destruyan.

A todo lo largo del camino, las autoridades tienen previsto colocar luminarias para seguridad de los usuarios. A tal fin, gestionan un crédito del Banco Mundial que dicen "tiene chances muy alta de salir".

El movimiento del suelo en la meseta comenzó el martes con la irrupción de las máquinas contratadas al Ejército Argentino. A las veinticuatro horas surgió el primer gran obstáculo, un enorme ducto de gas interponiéndose en el medio del trayecto. Hubo que alejar la traza unos 15 metros haciendo una "u" en la meseta.

La otra dificultad es el desmoronamiento de paredes arenosas de la barda por donde se empieza a abrir paso la senda. Al mediodía estaba la solución técnica mediante la ejecución de taludes de contención.

La secretaria de Obras y Servicios Públicos, Marta Buffolo, constató personalmente el ritmo de obra en la segunda jornada de trabajo en companía del responsable a cargo de la mediación de los trabajos, Víctor Abraham.

La dirección del emprendimiento se encuentra bajo la supervisación de Osvaldo Carrizo.

Aparte del movimiento de suelo, en el paso de la futura ciclovía hay que realizar excavaciones de roca, construir desagües, sanear cañadones y recién entonces pavimentar, iluminar y desmalezar el área circundante.

La senda abierta tiene ocho metros de ancho, aunque en rigor la cinta asfaltada medirá sólo tres y estará emplazada a tres metros de distancia del borde de rodamiento de la ruta 7 hacia dentro, sobre el lado oeste.

En la franja libre, entre la finalización de la trocha y el borde de talud, pasará un canal de escurrimiento de aguas en forma de "v" trunca que desembocará en el cañadón más próximo. La parte superior medirá dos metros de ancho en tanto la inferior exactamente la mitad.

Buffolo comentó la intención de conectar la senda a "Amejun y Copol, dos barrios próximos, y realizar derivaciones que faciliten a un porcentaje alto de personas llegar en su bici a su lugar de trabajo".

El proyecto se extiende en un línea de casi 8 kilómetros de longitud. Parte de Ciudad Industrial hasta su empalme con Cabellera del Frío, una calle troncal que interconecta

a seis barrios de área norte de la ciudad, conocida como "Terrazas de Neuquén". Desde allí el nuevo camino se incorporará con alguna variante a las calles de borde de Salud Pública y Alta Barda. En su otra desembocadura en la ruta 7 y hasta la rotonda de la calle Dr Ramón y la multitrocha, la comuna tiene previsto continuar la bicisenda y acoplarla a la ya existente en el sector del acceso norte.

El ejemplo que no debe repetirse

NEUQUEN (AN) - Ante la puesta en marcha de la construcción de la ciclovía que unirá el centro de la ciudad con el barrio Ciudad Industrial, vale la pena tener en cuenta las graves falencias que se observan en la construida hace unos años en la multitrocha, obviamente para no repetirlas. De paso, para refrescar la promesa incumplida de las autoridades de Vialidad Provincial de hacer las reparaciones, por un lado, e implementar un mínimo plan de mantenimiento.

La ciclovía es una alternativa de circulación que brinda básicamente seguridad, tanto para los ciclistas como para los automovilistas, pero si se construye con la desidia que se tuvo al hacer las de la ruta 22, ese concepto elemental quedará desvirtuado. Son los funcionarios municipales y sus técnicos, los responsables de asegurar que el trabajo se haga bien.

El estado que presenta la bicisenda de la multitrocha es lamentable. Constituye un contrasentido: lejos de ofrecer seguridad, con sus tapas rotas, cemento quebrado y tramos por donde ni siquiera puede circular un ciclista -este es un problema estructural, no de mantenimiento-, son un atentado para la seguridad de quienes la utilizan. De hecho, se puede observar a diario que los ciclistas desisten de usar la ciclovía y prefieren zigzaguear entre vehículos y camiones arriesgando su vida.

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