El 'neoveranismo' comienza a emitir contracciones

El alejamiento del gobernador implica distribución del poder en el sector que lidera.

'Neoveranismo'.

Esa es la palabra con la que en el frente interno radical se define la mutación que comienza a insinuarse en el veranismo a partir de una realidad: el distanciamiento que en la cotidianidad en el ejercicio del poder se producirá cuando el gobernador Pablo Verani entregue el mando a Miguel Saiz.

- No se trata de que Pablo pierda poder, sino simplemente de una cuestión de índole dialéctica propia del ejercicio del poder: En lo diario de las decisiones, habrá otros actores- comentó ayer a este medio un dirigente y funcionario con gravitación en ese plano del partido.

A hoy, ¿cuál es el mapa del poder del neoveranismo?

La que sigue es una respuesta a modo de aproximación a un escenario también pasible de mudanzas. Veamos.

* A pesar de un convencimiento muy extendido en medios políticos en cuanto a que el máximo operador político de Verani, el polémico y hoy legislador electo Daniel Sartor, verá acotado su poder con el alejamiento del mandatario, la realidad también tiene otra cara. Porque desde lo institucional -en este caso la bancada oficial-, a partir del 10 de diciembre Sartor tendrá significativa influencia sobre no menos de una docena de diputados, algunos de los cuales le deben su existencia política. Todo en un bloque que estará dirigido por el líder del otrora decidido no veranismo o línea Blanca, el vice Bautista Mendioroz. Sartor, de todas maneras, tuvo el domingo un fiero esmerilamiento de su poder. La poda del poder electoral del partido en Roca lo tiene como uno de sus principales responsables * Otro ala del neoveranismo es conducida por el ministro de Economía, José Luis Rodríguez, y el secretario de Hacienda, Pablo Verani. Ambos son legisladores electos. Pero el segundo mira al cielo, cierra los ojos y acaricia el deseo de ser titular de Hacienda de la administración Saiz. Una presencia que, de darse en el gabinete, no será necesariamente neutra dada la experiencia adquirida por Verani a lo largo se siete años en Economía. En alguna medida, Verani encarna con su aspiración un objetivo que fue perseguido por Rodríguez en su momento, pero que no logró: la continuación en el poder del equipo de técnicos que los acompaña desde el '96. Rodríguez, en tanto, se prepara para presidir la Comisión de Presupuesto y Hacienda. Pero clava el cuchillo en la tierra, pone el oído cerca y siente que el gobernador Verani lo quiere para candidato a intendente de Roca. Un espacio que también seduce a Daniel Sartor. Distante a generarse tensiones éticas en el ejercicio del poder y su reproducción, partícipe de la convicción de que el fin justifica los medios, Sartor no ve la política como una necesaria expresión de pragmatismo. Mirada que sí tiene, sin embargo, la sociedad Rodríguez-Verani. (AV/AR)