"Allende era un hombre de valores más que de ideología "

El sociólogo Zemelman recuerda el golpe del '73 en Chile y sus lecciones

El sociólogo destacó que el pasado "está vivo y nos sirve para iluminar el futuro, pero tenemos que repensarlo desde otra base".

NEUQUEN (AN).- En la memoria del sociólogo chileno Hugo Zemelman está muy nítido el recuerdo del Golpe Militar del 11 de septiembre de 1973 que derrocó al presidente Salvador Allende. Zemelman conoció a Allende en su juventud cuando militab en la juventud del Partido Socialista que fundó el ex presidente en 1933. Y lo acompañó en su gestión de gobierno como asesor en la Reforma Agraria que instrumentó a partir de 1973, cuando asumió al frente del país tras el histórico triunfo de la Unidad Popular en las urnas.

Treinta años después, su actividad académica en el Colegio México y la CLACSO, lo enfrenta a otro desafío. "El pasado está vivo y nos sirve para iluminar el futuro, pero tenemos que repensarlo desde otra base y eso supone corregir algunas exigencias en las que se ha estado apresado el conocimiento", sostiene. (ver aparte)

Zemelman reconstruyó con "Río Negro" una parte de ese acontecimiento histórico.

"Allende fue un visionario -subraya-. Por una parte, era un hombre muy comprometido moralmente con la gente y éticamente, más que ideológicamente; era un hombre de valores, más que de programas ideológicos. Y eso le da más fuerza y le permitió un acercamiento impresionante con la gente".

- ¿Y cómo vivió esa jornada del 11 de septiembre?

- La viví en Santiago. Es muy difícil decir cómo la viví. Fue una cosa totalmente aplastante, fue algo inédito una cosa increíble, fue como una pesadilla. Pero lo que de inmediato surgió como algo terriblemente ejemplificador, fue el comportamiento de este hombre (por Allende). A las 7 de la mañana se fue a la Moneda y perfectamente podría haber tomado una avión a esa hora, antes de que los militares tomaran el control de la situación. Y durante varias horas pudo hacerlo. Pero él no lo iba a hacer. Estaba fuera de su ética política absolutamente. Es cuestión de seguir la historia de Allende, fue un hombre absolutamente congruente y nunca cedió. Nunca se rindió. Siempre defendió sus puntos de vista. Dentro de su concepto de la política, como todo político era un artista de lo posible, es decir no era un maximalista. Pero desde el punto moral, sí fue absolutamente intransigente. El usaba una palabra siempre que se creía que era como una metáfora, pero al final el 11 de septiembre se demostró que no era una metáfora, que se podía traducir en un comportamiento. Era: "Yo seré implacable en el cumplimiento de mis responsabilidades. Seré implacable hasta las últimas consecuencias. A mi mo me sacarán de la Presidencia si no es acribillado a balazos". Eso lo dijo muchas veces - ¿Qué hay de cierto en lo que dice Pinochet y la derecha que gracias al Golpe Militar se salvó al país del colapso económico?

- Pregúntele a los chilenos - Se lo pregunto porque se lo pone a Chile como un ejemplo de despegue económico

-Bueno fueron políticas neoliberales, las primeras que se impusieron en América Latina y se impusieron a sangre porque en ese momento no había ninguna posibilidad de oponerse a nada (...) Entonces se impusieron políticas que en un régimen electoral no habrían sido posibles.

"Alternativas posibles"

NEUQUEN (AN).- "Lo que acaba de pasar con (el presidente Néstor) Kirchner y el Fondo Monetario Internacional no es una casualidad. Hace dos años atrás eso no habría ocurrido jamás", evaluó Zemelman, investigador del Colegio de México y la Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO).

Zemelman visita al región por una invitación del grupo de estudio Centro Sur de la UNC. El miércoles disertará en Zapala en el Instituto de Formación Docente sobre educación y la situación de América Latina Asegura que la globalización atenta contra la perpetuidad del sistema capitalista y obliga a los intelectuales a entender ese proceso para "formular modelos alternativos que no sean simplemente llamados de principios, sino que sean posibles, reales y que tengan actores que puedan empujar un modelo alternativo" Subraya las condiciones en las cuales el gobierno argentino selló el acuerdo con el FMI. "Bastó una amenaza del gobierno argentino de no pagar los 2.900 millones de dólares que se debían pagar el martes, para ver cómo negocio -opinió-. Y negoció en muy buenos términos. En el período de De la Rúa habría sido inconcebible" En el FMI "se están dando cuenta de que la globalizacion está creando condiciones de inestabilidad muy profundas que pueden ser descontroladas", dijo.