Arafat mostró su vigencia entre los palestinos

El presidente palestino Yasser Arafat, al que Washington e Israel intentan desplazar, sigue siendo una pieza irremplazable en el ajedrez de Medio Oriente, afirman expertos estadounidenses.

La cuestión del lugar de Arafat en el diálogo con Washington e Israel está más candente que nunca tras la renuncia de Mahmud Abbas La decisión de Korei de aceptar el cargo parece depender de un cambio de actitud de Israel -e implícitamente de su principal aliado, Estados Unidos-, que le niega su condición de interlocutor.

"Es la manera que tiene Arafat de mostrar a los estadounidenses y a los israelíes quién manda", dijo el profesor William Quandt, ex consejero del presidente Jimmy Carter para Medio Oriente. El jefe de la Autoridad Palestina "espera así convencer a Washington y a Israel de que deben tratar con él, que no pueden ignorarlo o marginarlo", agrega

Desde diciembre de 2001, el gobierno de Ariel Sharon decidió marginar a Arafat y de hecho lo mantiene confinado y vigilado en Ramallah El presidente estadounidense George W. Bush jamás mantuvo una reunión con Arafat. Los especialistas, que no prevén ningún cambio de enfoque de la administración Bush respecto a Arafat, subrayan sin embargo que sigue oponiéndose a su expulsión de Cisjordania y Gaza. Para Washington la prioridad es que el nuevo primer ministro, si finalmente es designado, tenga "la autoridad necesaria para hacer retroceder al terrorismo" "Nadie en el seno de la administración Bush quiere oir hablar de Arafat, pero todos son conscientes, en cambio, de que él es el jefe, que los palestinos lo consideran su presidente y que no puede ser ignorado", afirma Mary-Jane Deeb, de la American University de Washington. "Los estadounidenses reconocen que Abu Ala es una buena opción, en la medida en que no hay muchas más. Lo que quieren es a alguien que traiga calma",dijo.