La semana en Roca

Unidos o dominados

Pensar que los roquenses pueden votar en las elecciones municipales de la misma forma que en los comicios provinciales es subestimar a los miles de independientes que el 31 de agosto buscaron ponerle un punto final a la administración radical en Río Negro.

Que la oposición crea propio el caudal total de adhesiones recogido hace ocho días en Roca evidencia una errónea lectura de los resultados y un escaso conocimiento sobre las diferencias entre el voto para cargos provinciales y el voto para intendente.

Los dirigentes con ese convencimiento olvidan que no fueron pocos los que, al momento de poner la boleta de su partido en el sobre, cerraron los ojos y lanzaron al aire un "que sea lo que Dios quiera, pero que cambie". Esos roquenses no sentían simpatía por el candidato al que estaban apoyando, pero creyeron útil su sufragio.

Una conducta que sirvió y mucho para demostrar al gobierno provincial la antipatía a su gestión y estilo de hacer política. Pero que no se repetirá el 26 de octubre.

Por eso extraña que un sector del peronismo impulse a Carlos Soria como candidato a intendente.

Soria es resistido hacia adentro del partido, razón suficiente para aventurar que en la calle sus acciones políticas no gozan de una mayoritaria aprobación.

No obstante la respuesta final del "impulsado", el peronismo local transita hacia otro enfrentamiento interno, lo que evidencia su regreso a la débil capacidad para construir consensos La lucha por la candidatura a intendente de Roca permite concluir que el ordenado camino de la campaña provincial, con internas en tiempo y forma, hidalguías ante la derrota y suma de fuerzas en la misma dirección, fue apenas una excepción en la larga lista de frustraciones electorales provocadas por las heridas sin cerrar de los combates puertas adentro.

Teniendo en cuenta que los afiliados al PJ e independientes podrán elegir entre los precandidatos el 20 de septiembre, el pesimismo abruma a los peronistas que pensaban llegar totalmente cohesionados a las elecciones generales de apenas 36 días después.

Así las cosas, la ironía que surge en el resto de la oposición es preguntarse cómo se las arregla el PJ para cerrarse las puertas cada vez que aparece la posibilidad de llegar al poder vía las urnas.

En los últimos días tuvo otra oportunidad y hasta el momento el partido decidió desecharla: la alianza con el MARA y Encuentro por los Rionegrinos.

Dos fuerzas que evaluaron rápido el escenario y concluyeron en la necesidad de unificar estructuras para tener chances en los comicios municipales.

Claro, esperaban la adhesión del PJ para que el bloque involucrara al 90 % de la oposición y la lucha por los votos se polarizara.

Sin señales claras desde allí, los máximos referentes de MARA y Encuentro -Ricardo Sarandría y Luis Di Giácomo- avanzaron solos y el viernes conformaron "Unidos por Roca". Al mismo tiempo, ofrecieron la candidatura a jefe comunal a Hugo Beneitez.

Sorprendieron, es cierto. Un "tapado". Pero continuaron en el sendero de proyectar a figuras "limpias" en política, algo que cada partido busca desde hace meses, cuando varios empresarios roquenses fueron tentados para encabezar una lista el 26 de octubre.

El que no pudo buscar conclusiones rápidas sobre las elecciones del 31 de agosto fue el radicalismo roquense. El mismo que en 1995 sacó 11.000 votos de diferencia al segundo y ahora sólo consiguió un margen de 625 sufragios.

Durante toda la semana pasada sólo hubo tarea de reconstrucción a los maxilares y recién el viernes comenzó a hablarse en concreto. Fue cuando Jorge "Goyo" Martínez aceptó la propuesta del veranismo para recuperar el municipio en manos de Sarandría.

Un sí que calmó los ánimos luego de varios días de reproches, pero no desterró la posibilidad de interna, porque se sabe que en no son pocos los radicales roquenses con ganas de ser intendente.

No obstante, sobre lo que no hay dudas es que una vez resueltos esos dilemas, el aparato se abroquela. Luego, todo es avance.

Y cuando empiece su marcha, será tarde para que la oposición vuelva sobre sus pasos y evalúe alianzas.

La división por tres sólo sirve al que tiene más poder Por eso el PJ de Roca debería recordar más al General, para cambiar apenas su frase y decir que "el 2004 nos encontrará unidos o dominados... por la UCR".

Hugo Alonso

halonso@rionegro.com.ar