"Es una suerte de insolente en el poder"

El jefe de gabinete, Alberto Fernández, afirmó ayer que tras el abrazo en público entre el presidente Néstor Kirchner y el vice Daniel Scioli, "la vida sigue", aunque admitió las diferencias que habían sostenido ambos, al tiempo que reconoció que el primer mandatario es una suerte de "insolente en el poder", pero que eso "bienvenido sea" Por otra parte, destacó entre lo más relevante de la acción del Gobierno al cumplir sus cien primeros días, al trabajo destinado a reconstruir "una institucionalidad de la República, con jueces designados transparentemente, y con la necesidad de dejar de vivir en la impunidad en que vivíamos" Fernández, en declaraciones a radio Rivadavia, reconoció que "ha habido una diferencia de opinión clara entre el vicepresidente y el gabinete, incluyendo al Presidente, nosotros hicimos pública esa diferencia, pero la vida sigue, y Scioli va a trabajar con nosotros en lo que queda de los cuatro años de gestión" Interrogado sobre si el Presidente es un "insolente" por su forma de cuestionar directamente a los sectores del poder económico, respondió que "Kirchner es un insolente el poder, pero bienvenido sea, porque es mejor un poco de insolencia a que la realidad nos pegue un cachetazo, como lo hizo con (el ex presidente, Fernando) De la Rúa" El vicepresidente Daniel Scioli afirmó el martes por la noche que su "proyecto es apoyar al presidente (Néstor Kirchner)" desde su "lugar institucional" y aseguró que el entredicho con el primer mandatario "está superado" Scioli realizó esas declaraciones en el acto que encabezó el presidente en la Bolsa de Comercio. Además tuvo oportunidad de demostrar su alineamiento minutos después en la sede de la Unión Industrial Argentina, cuando Kirchner terminó su discurso a los empresarios En ese momento, el vicepresidente realizó claras muestras de aprobación a las palabras del primer mandatario y la escena se coronó con un abrazo con el santacrueño. Antes, había intercambiado miradas con el jefe de gabinete, Alberto Fernández, quien le palmeó afectuosamente la cabeza. (DyN)