Croceri planteará sus exigencias a Saiz

Intenta que el partido no se involucre en su gestión. Ya tiene el equipo que lo acompañará si acepta el cargo. Solicitará el manejo del crédito del BID y de las empresas públicas.

Croceri intentará alcanzar un acuerdo con Saiz para poder aplicar un programa de crecimiento en la provincia.

La nueva administración radical tiene previsto partir el actual ministerio de Economía en dos: Hacienda y Producción.

El proyecto de Miguel Saiz prevé que la cartera de Hacienda maneje todo lo referente a las finanzas públicas de la provincia y Producción que trabaje sobre políticas macroeconómicas. Al frente de este último ministerio estaría Alberto Croceri, un hombre de Cipolletti que nada tiene que ver con la política radical de los últimos años.

La imposición de este hombre en el nuevo gabinete será uno de los principales escollos que tendrá que sortear Saiz frente a un veranismo que no quiere perder el hilo del poder en todo lo referente a los números de la provincia. Este fin de semana Croceri se reunirá con Saiz a quien le planteará las siguientes exigencias para asumir como ministro:

* Manejar el crédito otorgado por el BID de más de 50 millones de dólares para el sector productivo de la provincia. En este sentido, Croceri pretende no sólo contar con esos fondos sino también manejarlos. Esto quiere decir que los funcionarios rionegrinos que hoy están ligados a los organismos internacionales no serán contemplados por el cipoleño. Oscar Gómez, un veranista ortodoxo hoy ligado al BID y BM, conformaría este pelotón de nuevos desocupados.

* Croceri presentará la nómina de su equipo técnico con extrapartidarios, muchos de ellos críticos del actual gobierno. Nombres como Anahí Tappatá, titular de Fundación Mediterránea o Carlos Celeste, quien en su momento presentó una denuncia penal contra el gobernador Pablo Verani por la venta de regalías eléctricas anticipadas, están en este lista de profesionales a ocupar puestos claves en la nueva cartera. Nombres todos ellos que generan fuertes rechazos dentro del radicalismo rionegrino y especialmente dentro de la administración veranista * Solicitará que todas las empresas públicas pasen a la órbita del nuevo ministerio a su cargo, para poder encauzar económicamente las mismas o, en caso de que esto no pueda hacerse, eliminarlas. Todas estas empresas que están hoy en manos de hombres ligados al actual gobernador Pablo Verani.

* Por último buscará unificar todos los organismos y dependencias relacionadas con la producción (Crear, secretearía de fruticultura, secretaría de la producción, etc.) para que no exista duplicación de funciones y sean más efectivas las normativas que se dicten para el sector.

Croceri sabe que todas estas exigencias golpearán duro en el veranismo. Pero también es consciente que el debe acordar los límites de su trabajo con Saiz para que el ministerio que el estaría dispuesto a conducir no quede 'desactivado' por Hacienda Existen antecedentes en este tema. Durante 1994 coexistieron los dos ministerios en la provincia, Hacienda y Producción. Sin embargo, este último carecía de recursos y nada pudo hacer frente al ahogo financiero que le aplicó Hacienda, en ese momento en manos de Pastor. Conclusión: si el nuevo ministerio no cuenta con recursos propios, difícilmente el proyecto de Croceri sea viable.

El tema político, que se centra en la embestida contra funcionarios del veranismo y la aparición de extrapartidarios, es un tema que deberá resolver en soledad el nuevo gobernador La jugada de Croceri abre la posibilidad de colisiones, pero Saiz es consciente que necesita un recambio de funcionarios en áreas claves para generar confianza en su nueva gestión.