Lunes 22 de setiembre de 2003
 

Turismo urbano sostenible

 

Por Antonio Torrejón

  El turismo en áreas urbanas es uno de los tipos más importantes de turismo del mundo. Los pueblos y ciudades pueden ser la puerta de entrada para quienes visitan comarcas turísticas y también lugares de destino en sí mismos. Las áreas urbanas atraen a los turistas en viaje de negocios y a los que van de vacaciones, y muchos de ellos combinan las actividades de trabajo con las de su tiempo libre. El turismo urbano genera ventajas como la promoción del empleo, la renta y los ingresos estatales y ayuda a financiar las atracciones, instalaciones, servicios e infraestructura que utilizan tanto residentes como turistas. Pero también puede provocar problemas como la congestión. El turismo en áreas urbanas debe planificarse, desarrollarse y gestionarse al detalle si se pretende aportar beneficios sin generar graves problemas, y ser económica, de respeto ambiental y socialmente sostenible. Lograr un turismo urbano sostenible requiere que se conserven y, con frecuencia, mejoren los recursos turísticos, que se controle el impacto sociocultural, se mantenga la calidad ambiental y que los mercados turísticos sean sustentables.
El desarrollo del turismo urbano debe tener en cuenta las atracciones, las actividades, instalaciones y servicios, los mercados turísticos nacionales e internacionales, los medios de transporte y otro tipo de infraestructuras, además de diferentes elementos institucionales. Las atracciones a menudo incluyen tanto lugares históricos como edificios más recientes, interesantes desde el punto de vista arquitectónico.
Las instalaciones culturales como museos activos, ecocentros y teatros pueden ser importantes puntos de atracción. Las compras constituyen también una actividad turística considerable. Debe disponerse de entretenimiento nocturno, enriquecidos con matices folclóricos lugareños. También es conveniente aplicar métodos de desarrollo imaginativos, por ejemplo, volver a desarrollar las zonas marítimas, puesto que para las instalaciones de tiempo libre reúnen características excelentes. La restauración y la conversión de edificios históricos y barrios para instalaciones turísticas pueden atraer a visitantes y a la vez justificar la conservación de los edificios. Allí podrían organizarse programas especiales, como festivales y ferias.
Para los turistas debe desarrollarse una variedad de tipos y niveles de precios de alojamiento y restaurantes y disponerse de un centro de información turística, que además de las respuestas ayuden a entender los valores naturales y culturales del lugar y servicios de tours y viajes con guías calificados, que posean el manejo fluido de no menos de dos idiomas. Las áreas destinadas al turismo deberán mantenerse limpias y seguras.
Tal vez sea aconsejable organizar una policía turística (ver Grunewald) que pueda ayudar a los visitantes y mantener el orden en los barrios donde se alojen. También deberán proporcionarse servicios de cambio de moneda, de correos y de telecomunicaciones. Es elemental que los turistas dispongan de zonas cómodas, agradables para los peatones y con medios de transporte seguros. Igualmente importante resulta la provisión de suministro de agua adecuado, energía eléctrica y gestión de basuras (que se aprecie en su calidad).
Entre los factores institucionales necesarios para el turismo urbano se encuentran: el establecimiento de estructuras organizativas, la puesta en práctica de programas de difusión sostenida que lleve al correcto marketing, la atracción de la inversión financiera en el desarrollo del turismo, la formación de personal que trabaje con eficacia en todos los aspectos del sector y la aplicación de las leyes y normativas específicas. Deben planificarse, desarrollarse y gestionarse todos estos componentes de un modo global e integrado y el sector también integrarse totalmente en la estructura general urbana.
Además, es conveniente calcular el uso que hacen los residentes de las atracciones, instalaciones y servicios junto con el que de ellos hacen los turistas. Del mismo modo es esencial la consideración de los impactos ambientales y socioculturales del turismo.
Un factor fundamental para el desarrollo del turismo urbano sostenible, tal lo remendó el reciente foro de Merlo (San Luis), es no sobrepasar las capacidades de carga y gestionar el uso que los visitantes hacen de las atracciones e instalaciones. Deberá llevarse a cabo una gestión eficaz y continuada de su desarrollo, que incluya el control riguroso de todos sus aspectos operativos y que contribuyan a la perdurabilidad del hecho turístico.
     
     
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