El crimen de Barco, en La Angostura, llega a juicio

La audiencia será hoy en Zapala, con el concubino de la mujer como único acusado.

Herlein fue detenido en Salta. Había viajado hacia su provincia natal días después de la desaparición de Barcos.

ZAPALA (AZ).- La Cámara Multifueros de Zapala será escenario hoy del juicio por el crimen de María Isabel Barco, ocurrido en febrero del año pasado en Villa La Angostura y por el cual está imputado su concubino, Ricardo Herlein La mujer, de 36 años, apareció muerta con golpes en la cabeza luego de una prolongada desaparición que dio pie a todo tipo de versiones. Por su parte, Herlein desapareció de la ciudad pocos días después del hecho y se mantuvo prófugo de la justicia hasta que fue detenido en la provincia de Salta, de donde es oriundo.

A raíz de un acuerdo entre las partes, el proceso judicial se reducirá a una sola jornada, de duración acotada. En este contexto, el encargado de abrir el debate será el fiscal Héctor Trova a los fines de su alegato.

A continuación llegará el turno para la defensa de Herlein, que será ejercida por el doctor Pablo Lara. Finalmente los camaristas Víctor Hugo Martínez, Oscar Rodeiro y Enrique Modina dispondrán de cinco días hábiles para elaborar la sentencia.

Herlein está acusado de homicidio calificado por el vínculo y la alevosía y podría corresponderle reclusión perpetua en caso de ser hallado culpable del hecho que sacudió la paz de la villa lacustre en el verano pasado.

María Isabel Barco fue vista con vida por última vez el 2 de febrero de 2002, cuando salió de su casa en un automóvil. Su cuerpo apareció más de dos meses después enterrado a un costado de la ruta 231 en cercanías a Villa La Angostura.

La pericias posteriores demostraron que la causa del fallecimiento fue un terrible golpe en la cabeza, que podría haber sido provocado con algún elemento contundente.

Poco después de la aparición del cadaver, Herlein fue arrestado por efectivos policiales de Salta. El sujeto había buscado refugio en esa provincia luego de huir del escenario del crimen apenas una semana después de la desaparición de su concubina.

Una de las hipótesis más firmes que circuló entre los investigadores sostenía que Herlein mató a la mujer y luego la trasladó en su propio automóvil, un Renault Clio, envuelta en una manta. Las manchas de sangre halladas en el vehículo abonarían esta línea de investigación.

La causa estuvo desde su inicio impregnada de episodios que complicaron la situación del imputado Por ejemplo, poco después de la desaparición de María Isabel Barco su concubino intentó vender el auto de la mujer en Bariloche.

En su declaración, Herlein sostuvo que Barco salió a andar en bicicleta ese sábado a las 20 y que nunca más volvió Sin embargo numerosos testigos coincidieron en señalar que la víctima regresó a la vivienda que ocupaba con su concubino aproximadamente una hora más tarde.

Incluso, varias personas habrían señalado en la etapa de instrucción que la vieron salir después a bordo del Renault Clio.

Herlein y Barco estuvieron en pareja alrededor de cinco años, ambos tenían 36 años al momento de la muerte de la mujer y eran separados de sus primeros matrimonios.