El BM insiste en la necesidad de ajustar las tarifas

El primer paso es renegociar los contratos, afirma. El titular del FMI dijo que confía en Kirchner.

Lavagna deberá enfrentar a partir del jueves gestiones clave ante el FMI.

El Banco Mundial (BM) reclamó ayer al gobierno argentino que acelere el proceso de renegociación de los contratos de las servicios públicos privatizados, lo cual impulsaría un aumento en las tarifas El Banco Mundial hizo su petición a través de la Corporación Financiera Internacional (CFI), que es el ala de la entidad que se dedica a asistir al sector privado y aportó dinero al proceso de privatizaciones en la Argentina.

"Quisiera que el país hiciera un esfuerzo para avanzar un poco más rápido", señaló ayer al ser consultado al respecto Peter Woike, vicepresidente Ejecutivo de CFI El funcionario sostuvo que "el sector privado tendrá que ceder en algo, las instituciones financieras también, pero creo que el gobierno debería avanzar en el tema de la reestructuración de las empresas de servicios públicos". Woike consideró que sería "una lástima que (el gobierno) tuviera que hacerse cargo de las empresas nuevamente" y dijo que "los inversores están desencantados con el lento avance de la renegociación" Según datos que fueron revelados en Washington el CFI tiene una cartera de inversión cercana a los 1000 millones de dólares y unos 300 millones estarían invertidos en la Argentina.

En el marco de la negociaciones con los organismos de crédito internacionales, el ministro de Economía, Roberto Lavagna, viajará el jueves a Dubai, Emiratos Arabes Unidos, para participar de la Asamblea Anual del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial y tratar dos temas claves: terminar de cerrar el acuerdo con el FMI y presentar una propuesta para los tenedores de bonos argentinos Según adelantaron voceros del Palacio de Hacienda, el ministro encabezará la comitiva que presentará a los acreedores privados el plan para refinanciar la deuda en cesación de pagos, que asciende a unos 76.000 millones de dólares.

Está previsto que durante el próximo fin de semana el directorio del FMI apruebe el programa de refinanciación de deuda acordado la semana pasada con Argentina, lo que servirá de marco para las negociaciones con los privados Ayer el director general del Fondo Monetario Internacional (FMI) Horst Koehler, admitió que confía en el gobierno del presidente Néstor Kirchner a la vez que estimó que el éxito del programa dependerá de como se lo instrumente En una entrevista con el diario británico Financial Times, Koehler puntualizó que "este primer acuerdo me hace pensar que tenemos que trabajar junto al Presidente Kirchner para analizar como podemos llegar a un acuerdo final".

"La fortaleza de este compromiso me llevó a pensar que necesitábamos trabajar junto con el Presidente sobre como podíamos llegar a un acuerdo", expresó Koehler, para luego agregar que "existe un contenido estructural en el programa. Nos hubiera gustado que fuera más preciso, pero debíamos ponderar si nos quedábamos afuera o seguíamos adelante. Decidí que debíamos dar un paso adelante, debido a que su liderazgo parece ser sincero" El director del FMI destacó que el viaje que hizo en junio a Buenos Aires lo convenció de la posibilidad de darle una oportunidad al gobierno de Kirchner para que termine con la crisis económica de la Argentina. De esta manera, Koehler vuelve sobre sus pasos e intenta morigerar la tónica de sus declaraciones anteriores, en las que se

Recién hoy presentarían el presupuesto

El Poder Ejecutivo enviará hoy al Congreso Nacional el proyecto de ley de Presupuesto para el año 2004, que incluye un aumento del Producto Bruto Interno (PBI) de 4 por ciento, una inflación del 7 por ciento, y está calculado con un dólar a 2,95 pesos, según consignaron fuentes de la Casa Rosada.

La propuesta sería entregada hoy a las autoridades parlamentarias por el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, quien estaría acompañado por el ministro de Economía, Roberto Lavagna, y el secretario de Hacienda, Carlos Mosse Según adelantaron fuentes parlamentarias el proyecto tendría un rápido tratamiento legislativo y podría aprobarse en menos de 60 días. En línea con el acuerdo firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) se proyectó un superávit primario de 3 por ciento, que será destinado básicamente a atender compromisos de la deuda pública, lo cual equivale a unos 12.700 millones de pesos De ese monto el 2,4 por ciento deberá ser obtenido por la administración central mientras que el 0,6 por ciento restante estará a cargo de los estados provinciales.

El programa propone aumentar las partidas destinadas a incentivar la obra pública -para fortalecerla se prevé la formación de varios fideicomisos específicos- e incrementar en unos 1.000 millones de pesos los actuales niveles de los programas sociales ya existentes "Esta es una clara señal que no va a haber ajuste y que con el FMI no se comprometió ajuste alguno", agregó un portavoz oficial. A su vez, no está prevista ninguna recomposición salarial para empleados estatales ni jubilaciones.

Para cumplir con las asignaciones pautadas, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) deberá recaudar unos 80 mil millones de pesos, lo que significa un 10 por ciento más de lo recolectado en 2003. Se estima que el paquete antievasión que el Congreso discute desde hace dos meses, aportaría unos 1.500 millones de pesos. Dentro de este contexto no habría margen suficiente para impulsar una rebaja en las retenciones.Para evitar cualquier tipo de encontronazo con el Parlamento, Economía admitiría cualquier modificación presupuestaria, siempre y cuando las cuentas se mantengan equilibradas y en caso de generarse nuevos gastos se imponga la fórmula para conseguir los fondos necesarios.

(DyN)