Se complicó la firma del acuerdo y hoy vencen u$s 2.900 millones

Ni la presión de EE. UU. y el BM sirvieron para acercar a las partes.

Wolfenshon (Banco Mundial) dijo que habrá un pronto acuerdo.

Pese al explícito apoyo de los Estados Unidos, que pidió flexibilidad en la negociación, la Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI) no lograban anoche cerrar un acuerdo en medio de febriles negociaciones. Se mantenía así el dramatismo sobre la decisión final que adoptaría el Gobierno nacional ante el vencimiento de 2.900 millones de dólares que opera hoy con el organismo.
En un día cargado de tensión y de contactos continuos al más alto nivel político , ambas partes mantenían duras negociaciones, en las que el tema tarifario, el superávit fiscal y la compensación a los bancos por los amparos judiciales, se constituyeron en los mayores escollos para sellar el pacto.
El gobierno utiliza como mecanismo de presión los vencimientos de deuda de hoy. Sólo se paga si se devuelve el dinero y aclaró al Fondo que sin acuerdo el país no cancelará esos compromisos con reservas.
Pero el organismo internacional no sólo recibe la presión de la Argentina. Según trascendió, Francia, Inglaterra, Italia y España seguían pujando por una suba en las tarifas de servicios públicos y hasta que Argentina no se las conceda, pedirán al FMI que no se firme nada. Mientras que Alemania e Italia estarían más preocupados por el nivel de superávit, ya que el ahorro que se lograría con él determinará cómo la Argentina podrá repagar la deuda con los acreedores privados.
Hasta última hora de la noche, el Presidente Néstor Kirchner se encontraba en su despacho analizando con el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, los pasos a seguir con la negociación y respecto de la cancelación de las obligaciones que operan a las 16 de hoy.
El presidente de los Estados Unidos le comunicó al embajador argentino en Washington, José Octavio Bordón, que su gobierno "seguirá respaldando" las negociaciones con el FMI.
Por su parte, el Secretario Asistente para el Hemisferio Occidental, Roger Noriega, sostuvo que "estamos muy interesados en los esfuerzos para alcanzar un acuerdo y este es el momento para que el FMI sea flexible y razonable en ayudar a llevar este proceso adelante".
En tanto, el titular del Banco Mundial, James Wolfenshon, también manifestó su optimismo: "Pienso que tendremos algo completamente claro'' en las próximas 48 horas, tanto sobre el nuevo acuerdo con el FMI como con respecto al plan para reestructurar la deuda con tenedores de bonos privados".
En Economía todos los funcionarios se llamaron a silencio y el motivo central es que la discusión técnica ya está absolutamente cerrada y sólo quedan adoptar las decisiones políticas.
Presionado por los países europeos cuyas empresas mayoritariamente son las que prestan los servicios públicos en el país, el FMI pretende que en el texto del programa la Argentina asuma el compromiso de llevar adelante un cronograma estipulado de aumento de tarifas.
Esta es una decisión que el presidente Kirchner no estaría dispuesto a aceptar y sería por tanto el principal escollo de la negociación. Frente a este complejo escenario el gobierno tiene que tomar la decisión de pagar o no un vencimiento improrrogable que opera hoy con el FMI.
La administración Kirchner daría la orden de pago sólo en caso de que exista un guiño firme del FMI para la firma del pacto.
En horas de la mañana el primer mandatario se reunió con el titular del Banco Central, Prat Gay, para instruirlo con el fin de que inicie todos los trámites burocráticos necesarios en caso que se decida hacer el pago.
(DyN y Redacción Central)

Bush respaldó a la Argentina

El gobierno de Estados Unidos afirmó su apoyo a la Argentina en las cruciales negociaciones que encara con el Fondo Monetario Internacional (FMI) al sostener que el país “seguirá teniendo” el respaldo de la Administración de George W. Bush.
Así lo expresó el propio presidente estadounidense en una carta que le entregó al embajador argentino en Washington, José Octavio Bordón, luego del que el máximo responsable para América Latina del Departamento de Estado, Roger Noriega, reclamara al FMI que sea “muy flexible” y cierre el acuerdo con la Argentina.
De acuerdo con lo manifestado por Bordón, Bush manifestó su respaldo a la Argentina en las negociaciones con el FMI, en la víspera del vencimiento de compromisos por unos 2.900 millones de dólares.
“De ser necesario, (Bush) volverá a tratar la cuestión con el secretario del Tesoro (John Snow)”, señaló Bordón.
Por su parte, Noriega afirmó que la Argentina y el FMI “acercaron posiciones” durante el fin de semana y “están cerca de un acuerdo”, que permitiría al organismo apoyar el programa económico argentino con nuevos créditos por montos iguales a los que Buenos Aires debería pagarle, lo cual de hecho equivaldría a reprogramar, o postergar, los vencimientos. Estados Unidos, señaló Noriega, ha dado pleno apoyo político a Argentina en los organismos financieros internacionales.

El principal escollo está en Europa

El Gobierno y el FMI, con la intervención directa de los Estados Unidos, mantuvieron durante toda la jornada febriles negociaciones tendientes a evitar que el país caiga en cesación de pagos también con los organismos internacionales de crédito.
Las decisiones quedaron a cargo de los máximos niveles políticos del gobierno argentino, el presidente Néstor Kirchner, quien liberó gran parte de su agenda para abocarse al tema, y del organismo, Horst Köhler y Anne Krueger.
La número dos del organismo desistió de un viaje que debía realizar a Londres, a una reunión preparatoria de la Asamblea de Dubai, y allí debía encontrarse con los intransigentes directores europeos que no quieren sellar un acuerdo hasta que la Argentina no asuma un compromiso firme de ajustar las tarifas.
Precisamente este tema, según señalaron altos voceros oficiales, volvió a quedar como el principal escollo para llegar a un acuerdo, ya que podrían quedar superados los cuestionamientos por el nivel de déficit fiscal y las compensaciones a los bancos por los amparos judiciales.
Lo que quiere el gobierno es que haya señales claras del Fondo como para autorizar el pago con reservas, que hoy se ubican en 13.600 millones de dólares, y que el desembolso se convierta solamente en un mero asiento contable.
Pretenden además que este pago sea de devolución inmediata cuando quede sellado definitivamente el acuerdo de mediano plazo.
A todo esto, el ministro Roberto Lavagna, y el secretario de Finanzas, Guillermo Nielsen, -quien también desistió a viajar a Londres- mantuvieron intensos contactos telefónicos con Washington con el fin de destrabar las negociaciones.
Alberto Fernández, en tanto, reiteró que el gobierno planteó que el tema de las tarifas "será producto de la revisión integral de las concesiones de servicios públicos" y que la Argentina "puede garantizar un superávit de 3 por ciento para el año 2004".

“No pagar sería dañoso y complicado”

Diferentes economistas advirtieron que sería “dañoso” y “complicado” que el gobierno no cumpla con el vencimiento de deuda por 2.900 millones de dólares ante el Fondo Monetario Internacional (FMI), aunque aclararon que tal situación no abrirá represalias inmediatas contra el país.
En eso coincidieron Manuel Solanet, economista vinculado al dirigente político Ricardo López Murphy; los consultores José Luis Espert y Orlando Ferreres; y el ex jefe del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Claudio Loser.
Desde otro ángulo, el economista Marcelo Lascano y el referente del denominado Grupo Fénix, Aldo Ferrer, consideraron que la falta de pago del vencimiento no desatará represalias contra la Argentina.
Solanet opinó que si la Argentina incumple con el vencimiento”entra en un procedimiento en donde le dan espacios de tiempo para que regularice su situación”.“Si entramos en default con los organismos multilaterales, pasaremos a formar parte de un club de países que no reciben inversiones. Esto sería dañoso para la Argentina”, indicó Solanet.
Por su parte, Loser advirtió que “si no se paga va a ver consecuencias complicadas para la Argentina” ante lo cual no descartó que se apliquen “sanciones importantes”.
El economista estimó que si no se paga “los mercados se van a poner muy nerviosos” porque los operadores pueden llegar a pensar que el gobierno “no negocia de buena fe”.
Por su lado, el referente del Grupo Fénix, Aldo Ferrer, aclaró que la Argentina “tiene un plazo todavía para continuar la negociación” y consideró que si no paga “el mundo no se viene abajo”. Aclaró que la posición del Fénix es que “siempre es conveniente hacer una negociación en términos compatibles con la recuperación económica” y consideró que “lo más probable es que se llegará a un entendimiento”.
Por su lado, el titular del Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer Mundo, el francés Eric Toussaint, consideró que la situación argentina para negociar con el FMI “no es desfavorable”. (DyN)

Ya rigen las leyes exigidas

Las reformas a la ley de Entidades Financieras y a la Carta Orgánica del Banco Central, que amplían la asistencia al Tesoro Nacional y dan inmunidad a los funcionarios que intervengan en la reestructuración de bancos, comenzaron a regir ayer con su publicación en el Boletín Oficial.
La ley 25.780 fue sancionada el 27 de agosto pasado, luego de que la Cámara de Diputados aprobó algunas de las leyes económicas con el objeto de agilizar las negociaciones con el FMI para la firma de un acuerdo a tres años de plazo.
Esta ley fue sancionada con 112 votos afirmativos, 41 en contra y una abstención, en medio de un debate donde los cuestionamientos del radicalismo se centraban en el tema de la inmunidad a los directores del Banco Central y los topes de la asistencia al Tesoro. Desde mediados de los noventa, el FMI venía reclamando para que a los directores del Banco Central que participen en la reestructuración de entidades financieras se los preserve de eventuales acciones judiciales, aunque esta exigencia siempre encontró fuerte resistencia en el ámbito legislativo.
La reforma introducida en la ley 25.780 establece que los actos adoptados por el Banco Central o Superintendencia de Entidades Financieras o Cambiarias, “sólo serán revisables en sede judicial cuando hubiere mediado arbitrariedad o irrazonabilidad manifiestas”.