Madacar y La Esfera con un mismo mensaje

Madacar, "A pura fuerza".

VIEDMA (AV).- Madacar y La Esfera son dos tríos viedmenses que ofrecerán mañana un recital en la sala mayor Antu Ruca del Centro Municipal de Cultura. Comenzará a partir de las 21, la entrada consistirá en un alimento no perecedero y lo recaudado se destinará a los comedores comunitarios de Viedma.

Si bien las bandas presentan propuestas musicales diferentes, tiene la peculiaridad de que dos músicos forman parte de ambas agrupaciones, y más aún que se trata de padre e hijo.

La Esfera está integrado por Daniel "Chino" Carrasco en guitarra eléctrica y voz, Matías Carrasco en batería acústica y arreglos rítmicos, y Julio Castro en bajo y coros, y para esta ocasión presentará su trabajo bajo el título de "Cambio de conciencia".

Por su parte, Madacar tiene al frente a Matías e guitarra y voz, Daniel en bajo y Rubén De Dío en batería, y -si bien ya debutó en un festival- es la primera vez que realizará a repertorio pleno el espectáculo "A pura fuerza".

La Esfera es un proyecto de Daniel Carrasco que ya lleva diez años de gestación en el cual fue cambiando muchas veces de formación, siendo cuarteto, trío y hasta un dúo de guitarra y batería cuando se incorporó Matías, su hijo de 13 años.

En su música hay diferentes géneros, pero Daniel dice que "se basa en el jazz, los acordes que uso tienen que ver mucho con eso. Pero también tiene que ver con el tango, o con el folclore. Pero en la música muchas veces los rótulos son imprecisos". A pesar de esto para este recital va a concentrar un repertorio más relacionado con el rock, que sea más acorde con lo que hace Madacar.

"Hay muchas bandas que mezclan los géneros como Kapanga, la Bersuit, que por ejemplo han logrado que tipos del heavy metal incorporen la cumbia como un género más", dice el músico, "pero lo fundamental es no separar la música de los ideales, y lo musical no puede quitar la parte lírica".

Sobre el título del espectáculo "Cambio de conciencia", explica que "habla de que se puede cambiar la conciencia de otra manera; primero debe cambiar uno como artista, y luego si la gente se engancha, buenísimo".

También tiene pendiente una grabación en estudio, pero saca en limpio que con los años va sumando experiencia con los músicos. "Viedma es un lugar de paso para muchos; yo volví y me quedé... tampoco creo en eso de ir a buscar a algún otro lado lo que no puede encontrar en uno".

Por el lado de Madacar la música es mucho más heavy, pero el mensaje en sí es el mismo. Matías Carrasco explica que tiene cosas de heavy metal y hardcore, y está contento con haber conseguido un baterista como Rubén De Dío que le dio a la banda mucho más peso, y explica que tocar con el padre le da confianza.