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Claudio Basso hizo estallar con música y alegría dos Ruca Che

Para los chicos, no todo es rosa

NEUQUEN (AN).- El movimiento habitual en la vivienda de los Basso cambió intempestivamente desde el viernes. El teléfono no tuvo paz y el desfile de familiares, amigos y fans fue incesante. Carlos, padre del artista, decía entre risas que "la gente piensa que tenemos a Claudio escondido". Hasta ese momento sus seres queridos ni siquiera sabían si tendrían la posibilidad de encontrarse con él un par de minutos. No todo es color de rosa en la vida de estos 18 jóvenes que de un día para el otro fueron alumbrados por la fama. Basso padre reveló con lujo de detalles el precio que debió pagar Claudio al dejar de ser un desconocido. Los días se le hacen "muy difíciles" lejos de sus hijos y sus seres más cercanos y que, "contrario a lo que piensa la gente", el "Chino" es "un empleado de Telefé, un artista a sueldo que no tira manteca al techo".

La vorágine que le imprimió la vida artística no le da siquiera respiro. "La última vez que hablé con él me dijo que estaba muy cansado. El último Luna Park lo tuvo que hacer tomando antibióticos", aseguró Basso. No está conforme con quienes manejan la carrera de su hijo. Cierta vez "tuve que enojarme con la producción porque no lo dejaban hablar con sus hijos", situación que cambió cuando la figura de Claudio como padre se transformó en sinónimo de rating.

El pasar económico del "Chino" no es el mejor. No cobró los 50 mil pesos del premio (adelanto de regalías por discos), y vive con lo justo. "Es una vida muy sacrificada. Todo le cuesta el doble", confió el padre.

Miles de kilómetros para unos buscavidas

NEUQUEN (AN).- No es extraño que los fans recorran cientos y hasta miles de kilómetros para escuchar a su grupo de rock amado. Pero sí lo es que una minitropa de vendedores ambulantes una el país ofreciendo productos de con el rostro de afamados artistas. Es el caso de 19 "buscavidas" porteños, que decidieron seguirle los pasos a los muchachos de Operación Triunfo desde que se inició esta gira por la geografía argentina.

"Pilo" llegó a esta capital cerca de las 14 y, sin comer ni dormir, se apostó en las inmediaciones del Ruca Che para ofrecer, a uno y dos pesos, fotos de Claudio, Pablo, Emanuel y todos sus compañeros. "No me para nadie. De algo hay que vivir. Seguí toda la gira, y la semana que viene me voy para el Chaco", aseguró el muchacho oriundo de La Boca.

No le ha ido nada mal con su rebusque. En alrededor de ocho horas recaudó 400 pesos en esta capital, y 24 horas antes "levanté 270 pesos en La Pampa", agregó. El mejor día fue el jueves de la semana pasada, cuando en un recital de Mambrú se alzó con la jugosa suma de mil pesos. Chicas y mujeres de todas las edades mostraban orgullosas remeras, prendedores, llaveros, vinchas y fotos de los cantantes. "Hay de todo, como en botica", hubiera señalado un fallecido conductor de TV.

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