Más de 35 muertos en Bolivia

La mayoría integraba un grupo folclórico

El rescate de las víctimas era dificultoso.

LA PAZ- Autoridades policiales confirmaron ayer que al menos 36 integrantes de un conjunto folclórico murieron en un accidente en la carretera más peligrosa de Bolivia. El jefe de la Policía de Tránsito, coronel Alberto Castillo, dijo que sólo cuatro personas, rescatadas heridas, sobrevivieron al accidente registrado el domingo cuando un autobús, con 40 pasajeros, se precipitó a un abismo de 450 metros de profundidad.

El accidente ocurrió en una región semitropical en un punto conocido como "La Cola del Diablo", en el serpenteante camino a los Yungas, unos valles agrícolas que abastecen La Paz.

Más de un día después del siniestro, cuadrillas de rescate bregaban por extraer los cuerpos de entre la maleza de un precipicio de 600 metros, donde cayó un vehículo de transporte público con al menos 40 pasajeros a bordo, 10 por encima de su capacidad.

El coronel Castillo confirmó que 37 de los ocupantes del autobús eran bailarines o músicos de un grupo folclóric que viajaba a Caranavi, a 150 kilómetros de La Paz, para participar en una fiesta popular en devoción a la "Virgen de las Nieves", patrona de la localidad.

El último balance proporcionado antes del mediodía refirió la existencia de 36muertos y cuatro heridos, ingresados estos últimos en nosocomios de La Paz con diferentes cuadros de gravedad.

Se trata del más peligroso camino boliviano, de 3 ó 4 metros de ancho, abierto hace 70 años por prisioneros paraguayos y, paradójicamente, uno de los más concurridos por los turistas extranjeros, donde sólo en 2002 perdieron la vida en iguales circunstancias 200 pasajeros.

El siniestro se produjo cuando el chofer del vehículo se acercó al abismo para dar paso, "muy lentamente y con cuidado", a un vehículo que circulaba en sentido contrario.

Peritos de la policía de caminos presumen que, como consecuencia de las lluvias caídas estos días en la zona, la vera del camino cedió ante el peso del vehículo que permaneció detenido sólo durante algunos segundos.

(AFP/Reuters)