Jueves 28 de agosto de 2003

Nación estudia aumentar el impuesto al GNC

El alto nivel de conversión de vehículos de combustibles líquidos a gas hizo bajar los ingresos por el impuesto a las naftas. El gravamen que se aplica subiría entre un 10 y un 11%.

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El GNC, la opción más económica entre los combustibles, podría subir si prospera un proyecto que analiza el gobierno.

BUENOS AIRES (ABA).- El Poder Ejecutivo Nacional está analizando la elaboración de un proyecto de ley para promover un aumento en el impuesto que se aplica sobre el Gas Natural Comprimido (GNC), lo cual tendrá una incidencia directa en los automóviles particulares y en la economía doméstica de muchos ciudadanos.

Un importante funcionario del Ministerio de Economía de la Nación aseguró a "Río Negro" que el ajuste que se está estudiando ronda entre el 10 y el 11 por ciento sobre el que se aplica en este momento.

Hay que tener en cuenta que en la actualidad el impuesto sobre ese combustible es del 16 por ciento sobre el metro cúbico de GNC y para ello se está confeccionando un proyecto de ley que sería remitido al Congreso durante el mes de septiembre.

Según uno de los principales asesores del ministro de Economía, Roberto Lavagna, el objetivo concreto de este aumento en el impuesto sobre el GNC es mejorar la recaudación impositiva, compensar lo que se pierde de ingreso para el fisco por la constante conversión de automóviles nafteros y diesel al gas y un mayor equilibrio tributario en la venta de combustibles.

En el propio Palacio de Hacienda de la Nación admitieron que este proyecto tendrá incidencia en la región de Río Negro y Neuquén, donde se ha registrado un notable incremento en la utilización de Gas Natural Comprimido para los automotores.

A su vez, en el Gobierno nacional aseguraron que esta iniciativa fue analizada conjuntamente con los funcionarios del Fondo Monetario Internacional (FMI), quienes advirtieron el desfasaje que se está produciendo en el consumo de los combustibles en la Argentina y la forma en que esa circunstancia está afectando la recaudación tributaria.

Los cálculos preliminares que han elaborado en el Ministerio de Economía dan cuenta que el incremento que se analiza podría dejar una mejora en la recaudación mensual de combustibles del orden de los 40 a 50 millones de pesos, con lo cual en todo el año podría representar la singular cifra de alrededor de 500 millones.

La realidad del país demuestra que la venta de nafta, en el transcurso del último mes, cayó más de un 15%, un hecho que para los expendedores de combustible obedece, entre otras causas, a aumento notable de la conversión a GNC de automóviles que utilizan combustibles líquidos.

Sin lugar a dudas que el público consumidor en el país optó por el GNC, por la enorme diferencia de precio que existe con el resto de los combustibles Si se tiene en cuenta que, fuera de la región patagónica que mantiene la subvención a los combustibles, las naftas van de 1,40 a 1,90 pesos el litro, la comparación no deja ningún margen para la elección porque el equivalente en el GNC vale apenas 50 centavos.

En números y cifras particulares esto significa que los 20 pesos que consume un automóvil naftero para recorrer un determinado trayecto, en el vehículo con GNC el mismo circuito cuesta solamente cinco pesos.

A su vez, desde la devaluación hasta la fecha el gasoil subió un 140%, las naftas un 89%, en tanto que el GNC se incrementó en un 31%, y a la vez, subsiste una mayor carga tributaria sobre los combustibles líquidos.

Las cifras del ente regulador del gas (Enargas) dan cuenta que en junio último se incorporaron al parque automotor unas 25.658 unidades con GNC.

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