El cirujeo creció un 500% en los últimos años

De 50 personas en 1998 se pasó a 300 en la actualidad. La crisis fue el disparador del crecimiento en el basural. El municipio neuquino analiza un proyecto para evitar más accidentes.

Roca visitó el basural con funcionarios y periodistas. Atribuyó el aumento del cirujeo al "deterioro de las condiciones económicas".

NEUQUEN (AN).- De forma constante y a un ritmo vertiginoso, la cantidad de personas que cirujean en el basural municipal se incrementó un 500% durante los últimos cinco años. Este notable incremento tuvo como disparador la crisis que azotó al país y la provincia en los últimos años. Así lo admitió ayer el subsecretario de Gestión Ambiental del municipio, Juan Carlos Roca.

En rigor, según las cifras que maneja la cartera que conduce Roca, en el año 1998 la cantidad de personas que concurrían diariamente al basural eran 50. Hoy la cifra se amplió considerablemente: Hay 300 personas por día buscando en las bolsas de basura la forma de paliar la situación social y económica en la que están inmersas. Roca, que ayer visitó el basural junto a funcionarios de su área y periodistas, atribuyó este incremento al "deterioro de las condiciones económicas" del país y la provincia. Indicó que el aumento registrado se debe a que muchas personas "asisten aquí para recuperar materiales que les permita obtener algún beneficio económico".

La crisis impactó también sobre el tonelaje de basura que se descarga. Mientra en 2001 eran arrojadas 206 toneladas diarias, hoy la cantidad se redujo a 170 toneladas por día. Con excepción de los fines de semana -no hay descarga de residuos- los demás días el basural muestra una actividad vertiginosa cada vez que ingresa un camión de Cliba, la empresa responsable de recolectar los residuos en esta ciudad. Esto se advierte principalmente durante las madrugadas, cuando los camiones arrojan la mayor cantidad de residuos.

Muchas de las personas que cirujean en el predio aguardan los camiones bajo carpas de nylon. Otros directamente lo hacen a la intemperie.

Metales, cartones y botellas son los objetos más buscados entre las bolsas de basura domésticas para luego venderlos. A esto se suma los alimentos -sobras domésticas y aquellos vencidos que arrojan los hipermercados de la ciudad-.

Días atrás el intendente Horacio Quiroga explicó a "Río Negro" que a principios de su gestión (1999) la mayor parte de la personas que asistían al basural eran crianceros de la meseta que buscaban alimentos para sus animales. Con el paso del tiempo comenzaron a desembarcar personas de diferentes barrios de la capital y de otras ciudades aledañas, agregó, y no descartó l posibilidad de que algunas se alimenten en el lugar.

Sin embargo ayer el director de Limpieza urbana y Gestión de Residuos, Rubén Boticceli, negó que la gente busque alimentos. "Es importante hacer bien el diagnóstico", afirmó Boticceli. "Esta es una fuente laboral para 300 personas", explicó.

De todas formas, al igual que Quiroga, reconoció que el funcionamiento del predio es difícil de controlar En este sentido anunció que se está proyectando destinar un lugar alejado del relleno, que es donde se generan los mayores inconvenientes, para que aquellos que realizan el cirujeo no corran riesgos sanitarios o de accidentes.

En los últimos meses fueron varios los accidentes que se produjeron en el interior del predio. Uno de estos casos fue el Rubén, un chico de 11 años que fue aprisionado por la compactadora de basura mientras buscaba alimentos en el basural.