El ente regulador responsabilizó a la empresa por los problemas de saturación del ducto. Acusó a la concesionaria de no haber ejecutado las obras para evitar el colapso.

La empresa concesionaria debía realizar obras claves en el gasoducto que no se hicieron, según explicó Enargas.

NEUQUEN (AN).- El Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) responsabilizó a la empresa Camuzzi Gas del Sur por los problemas ocasionados en el Gasoducto Cordillerano, que está desbordado por la demanda. El órgano de contralor acusó directamente a la concesionaria del servicio por no haber ejecutado las obras necesarias para evitar el colapso del ducto que abastece a la zona cordillerana de Neuquén y Río Negro, y que se extiende hasta la localidad de Esquel, en Chubut.
Varias localidades cordilleranas sufrieron este invierno los efectos de las restricciones a nuevos usuarios de gas y protagonizaron numerosos reclamos.
"La licenciataria no tomó los recaudos necesarios para renovar los contratos firmes que tenían formalizados con sus grandes usuarios, no efectuó mejoras y obras adicionales a sus activos esenciales en tiempo razonable, acorde al ritmo en que otorgó factibilidad de suministro", dice el Enargas en una nota que envió a la Legislatura neuquina.
Es más, sostiene que Camuzzi "se negó a prestar el servicio público a futuros usuarios, inclusive cuando éstos contaban con la factibilidad de suministro".
El documento, que lleva la firma del presidente del organismo nacional, Héctor Formica y tiene fecha del 28 de julio pasado, es la respuesta oficial a una declaración que aprobó semanas atrás por unanimidad la Cámara de Diputados provincial.
Los legisladores habían urgido al Enargas para que ejerza el poder de policía e intimara a las empresas a cargo del transporte y distribución del gas en la región a realizar las obras del gasoducto.
Ayer al mediodía los legisladores de la Comisión de Energía difundieron el escrito en la reunión parlamentaria donde abordaron, además, el proyecto Chihuido II.
El presidente de la Comisión de Energía, el aliancista Oscar González, dijo que el Enargas critica que la empresa "haya esperado a que el gasoducto colapse para plantear el problema del Gasoducto Cordillerano".
Recordó que cuando Camuzzi y Transportadora Gas del Sur (TGS) explicaron la situación del ducto en la Legislatura, responsabilizaron del problema a la Ley de Emergencia Económica que dispuso en enero de 2001 el ex presidente Eduardo Duhalde. Esa norma dejó sin efecto el plan de revisión de las tarifas y el plan de inversiones para el período 2003-2007 entre el Enargas y las empresas que están a cargo del servicio desde 1993.
Según el documento del Enargas, ese plan de inversiones para la expansión del Gasoducto Cordillerano comprendía para este año 6.500 millones de dólares -2.700 por parte de Camuzzi y 3.800 millones de dólares responsabilidad de TGS- hasta alcanzar en 2007 una inversión total de 31.300 millones de dólares. De esa torta, Camuzzi debía aportar 17.000 millones de dólares y TGS 14.300 millones de dólares. El objetivo era aumentar de 1.186.000 metros cúbicos por día a 1.688.000 metros cúbicos la capacidad de transporte que posee el gasoducto para dar respuesta a la futura demanda.

Incumplimiento

El Enargas atribuye a Camuzzi el incumplimiento de la Ley 24.076, que regula el transporte y distribución del gas natural, en vigencia desde 1992. Esa norma obliga a los transportistas y distribuidores a "tomar los recaudos necesarios para asegurar el suministro de los servicios no interrumpibles".
El organismo también aduce que la licenciataria quebrantó pautas establecidas en las reglas básicas de licencia que contempla un decreto del Poder Ejecutivo Nacional.
La normativa ordena por ejemplo que "la licenciataria deberá efectuar todas las mejoras y obras adicionales a los activos esenciales en tiempo razonable (...)". Y prevé que esas reparaciones estarán a cargo de la empresa.
El Enargas le dio un plazo de 10 días hábiles a Camuzzi para presentar su descargo. Y extraoficialmente trascendió que se le podría aplicar una multa a la firma de unos 20.000 pesos. El pronunciamiento del órgano constituye el prólogo de lo que será la discusión tarifaria en las próximas semanas entre las empresas concesionarias de servicios públicos y el gobierno nacional.
El legislador del ARI, Carlos Moraña, afirmó que la nota del Enargas "confirma que las empresas durante todos estos años han ganado muchísima plata y lo que hay que hacer es obligarlos a ejecutar las obras sin atarlas a un aumento de las tarifas".

El presidente sospecha de presiones tras un apagón

El presidente Néstor Kirchner manifestó ayer que espera que el corte de luz que se produjo en un amplio radio de la Capital y el Conurbano "no sea una actitud de presión" de las empresas privatizadas para aumentar las tarifas, en tanto que le pidió a la gente "que esté alerta" sobre este tipo de incidentes "Esperemos que el corte de luz de esta mañana no sea una actitud de presión, porque se estaría andando por muy mal camino. La gente tiene que estar alerta. No es de extrañar que a veces se recurra a este tipo de procedimientos, esperemos que así no sea", prosiguió el jefe del Estado Kirchner hizo esas declaraciones al ser interrogado por periodistas sobre la posibilidad de un sabotaje, en momentos en que salía de una reunión con las autoridades militares Según fuentes oficiales, Kirchner, quien salió muy duro a criticar el corte de energía, dio instrucciones al ministro de Planificación, Julio de Vido, para que se investigue por qué se produjo el incidente que dejó sin luz a 390 mil usuarios y afectó el funcionamiento de tres líneas de subterráneo, además de unos 600 semáforos Según Kirchner, "hay algunos grupos que no trepidan en medios para tratar de torcer el rumbo. Esperemos que no sea así, pero evidentemente llama la atención" Cuando se le preguntó si se trataría, efectivamente, de un modo para lograr un aumento de tarifas, Kirchner respondió que "no lo puedo afirmar", pero enseguida agregó: "Espero que estos cortes de luz no sean un mecanismo a lo que algunos grupos se han acostumbrado".

El presidente expresó estos conceptos después de presidir un acto en Casa de Gobierno, donde se presentó el proyecto sobre la Defensa en la Agenda Democrática. El corte causó preocupación en el Gobierno, y generó dudas sobre una posible intencionalidad política de las privatizadas para presionar por aumentos.

Fuentes oficiales reiteraron que los grupos "tienen que entender que los mecanismos de extorsión no funcionan con este gobierno" En tanto, el presidente de la Asociación de Generadores de Energía Eléctrica de la República Argentina (AGEERA), Ernesto Badaraco, abogó por una "pronta solución" por parte del gobierno nacional al reclamo que realizaron para cobrar la energía volcada al sistema interconectado en junio último, por un monto que calculó en torno a los 170 millones de pesos El reclamo de las generadoras vino a coincidir con la jornada en la que se produjo el corte en el suministro eléctrico en diversas zonas de la Capital Federal y el conurbano bonaerense, que afectó a 390 mil clientes del área atendida por Edesur. La distribuidora informó que el corte del servicio se produjo por fallas en el sistema de alta tensión. (DyN)