Sábado 2 de agosto de 2003

Diputados del peronismo quieren saber si hubo alguna irregularidad en el convenio por los remedios

El PJ se suma y pide investigar el trato con Feclir

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Este es el lugar donde funciona Eleón SA. Sólo hubo respuesta muy parcial.

VIEDMA (AV)- El bloque de legisladores justicialistas solicitó al Fiscal de Investigaciones Administrativas, Carlos Malaspina, que determine si hay delitos en la negociación de contratos por compra de insumos, concretados entre el Instituto Provincial del Seguro de Salud (Ipross) y la Federación de Clínicas de Río Negro (Feclir).

La bancada opositora se hizo eco de la denuncia presentada por la Recrear Río Negro, en la que Agustín Argibay comparó el funcionamiento del Ipross con el PAMI, obra social nacional que actualmente "se encuentra altamente cuestionada en el ámbito nacional".

De acuerdo a la denuncia, el legislador Javier Iud señaló ayer en conferencia de prensa que "el mismo esquema utilizado en el PAMI se estaría reproduciendo en la modalidad de contratación empleada por el Ipross, lo que redundaría en perjuicio de este organismo y sus afiliados".

Mencionó, basándose en la denuncia, "las sugestivas y reiteradas contrataciones realizadas entre el Ipross y las entidades que agrupan a los prestadores privados en desmedro del sistema de salud pública en general" y que por lo tanto "merece una exhaustiva investigación de todos y cada uno de los contratos celebrados en los últimos cinco años".

Los convenios celebrados fueron puestos en duda por la compra de prótesis y de medicamentos oncológicos a Feclir, que le cuestan a la obra social nada menos que 400 mil pesos por mes. Según Recrear, además de un sobrecosto en el valor de los remedios, hay un monto de dinero que no tiene destino cierto, porque se pagan 400 mil pesos, pero la empresa proveedora sólo recibiría 140 mil pesos. Entre otras medidas, el PJ sugirió que se pida al Ipross copia del convenio y se cite a declarar a Argibay, el abogado Jorge Gómez, la titular del Ipross, Adriana Gutiérrez y el presidente de Feclir, Carlos Gigena.

En Eleón SA creen que "no hay nada que objetar"

BUENOS AIRES (ABA) .- En Eleón S.A están bien al tanto de la denuncia por presuntos sobrecostos en los remedios oncológicos que el Ipross compra para sus afiliados.

La sede de la firma está ubicada en la periferia del barrio de Constitución, presenta una fachada amarilla, con un reja al costado y tres puertas de acceso. De una de ellas, sale una sola persona que se presenta como Julio quien acepta dar una versión de la empresa, aunque sostiene que el único autorizado para hablar es Alberto Bonini quien "hasta el miércoles va a estar en General Roca".

Sin embargo, este diario no pudo dar con su paradero en Roca y consultadas las autoridades de Feclir, dijeron que no habían tenido ninguna reunión ayer con el directivo de esa firma ni tenían previsto ningún encuentro.

En Buenos Aires, el interlocutor se muestra sonriente, sólo acepta hablar en la vereda del local y se resiste a identificarse por su apellido. Sin embargo, sus palabras arrojan una pista para conocer cuál es la posición de la prestadora donde trabaja. Sostiene que Eleón firmó un contrato con Feclir al que "no hay nada que objetarle". El mismo asegura que lo que se cobra es beneficioso para la Federación dado que son medicamentos de "muy alto costo".

No quiere decir si los mismos se importan o se producen en un laboratorio local. "Son muy caros", se limita a añadir.

Cuándo este cronista le pregunta por qué facturan por 400.000 pesos, cuando en verdad perciben 140 mil pesos, responde como un rayo: "¿Quién le dijo que cobramos 140 mil?".

- "Así surge de las transferencias bancarias", se le asegura.

- "No es así, se cobra lo que marca el contrato", contesta el hombre de estatura mediana, algo molesto.

Se niega a responder desde hace cuánto tiempo existe el vínculo entre la empresa y la Federación que le suministra los productos a la obra social Ipross. "Hace bastante, nunca se cuestionó nada porque se benefician las dos partes. Nosotros vendemos y los compradores adquieren a un buen valor de mercado".

Por último, el empleado de Eleón S.A adjudica todo a una "campaña política". "Después de las elecciones va a ver cómo todo queda aclarado. No hay más que leer la solicitada (por la publicada en "Río Negro") para advertir que se trata de una maniobra electoral". Es lo último que está dispuesto a afirmar. Aún desde un semi-anonimato, el único capaz de dar la cara demuestra no estar desinformado de la grave denuncia presentada por Recrear y a la que ahora se sumó el PJ.

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