Domingo 10 de agosto de 2003

Zapatistas vuelven a desafiar al gobierno de Fox

Aprovechando una ambigüedad constitucional, los rebeldes liderados por el 'subcomandante Marcos' lanzaron el gobierno autónomo de sus municipios. Así, relanzan la lucha política.

 

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Los zapatistas aprovechan la debilidad actual del gobierno para volver a la carga con sus reclamos de autonomía y justicia social.

OVENTIC, México (AFP) - La guerrilla del EZLN anunció ayer "una nueva forma de lucha" antes de proclamar la creación de las "Juntas de Buen Gobierno" en varios pueblos que controla en Chiapas, lo que ha sido interpretado como un desafío pacífico al Estado mexicano Varios líderes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) señalaron en la aldea chiapaneca de Oventic (unos 1.000 km al sureste de la capital mexicana), sede de la concentración de los rebeldes, que el nacimiento de las Juntas supone un nuevo mecanismo de lucha guerrillera. "Este es un acto histórico porque hoy termina una etapa de nuestra lucha y comienza otra de lucha política, resistencia y autonomía de los pueblos indígenas de México", dijo el comandante 'Rafael' 'Rafael' y otros subalternos del máximo jefe del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), el subcomandante Marcos, formularon la declaración al dar la bienvenida a miles de simpatizantes nacionales y extranjeros del grupo insurgente Al menos 5.000 indígenas de diversas etnias acudieron al llamado del subcomandante Marcos en Oventic, una diminuta localidad situada en los Altos de Chiapas, rodeada de un espectacular paisaje montañoso Marcos, quien era esperado en esa aldea, habría estado el fin de semana anterior en Ciudad de México y antes viajó de manera clandestina a Estados Unidos, Belice y Guatemala, según el diario capitalino El Independiente, que citó fuentes de seguridad La Constitución mexicana no contempla la autodeterminación, un reclamo que los zapatistas exigieron en su propuesta de Ley Indígena, tras su levantamiento en armas en 1994. Los zapatistas se acogieron, sin embargo, a la fórmula de "mancomunar" los 30 municipios que cuentan en su poder, sí contemplada en la Carta Magna, bajo cinco "juntas de buen gobierno" encargadas de administrarlos El acto supone también otro revés para el gobierno del presidente Vicente Fox, quien prometió resolver el problema de la insurrección zapatista.

El EZLN decidió aprovechar el "impasse" político que provocaron las pasadas legislativas del 6 de julio, que dejaron en franca desventaja al partido de Fox. "No creo que el anuncio sea producto de la situación política, pero está claro que ha aprovechado la coyuntura", opinó Pedro Raul López Hernández, presidente de la Comisión estatal de Derechos Humanos de Chiapas.

El encapuchado subcomandante zapatista jugó de nuevo tanto para la opinión pública nacional como para la internacional. "Los zapatistas estamos y aquí nos quedamos", reza uno de los carteles de la convocatoria, junto a murales de Emiliano Zapata y el Che Guevara. En la plaza mayor de Oventic convivían tzotziles, lacandones y zoques, ataviados en bellos trajes regionales, junto a militantes antiglobalización provenientes de Francia, España, Italia y EE.UU.

Escenario: Juntos pero no revueltos

En Oventic, sede del mayor encuentro zapatista de los últimos dos años, conviven armoniosamente, pero separados, indígenas chiapanecos con militantes y periodistas extranjeros, trajes coloridos y música folclórica con teléfonos satélite y cámaras de TV El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) convocó a celebrar ayer la instalación de cinco de "Juntas de Gobierno", que se distribuirán la gestión de la treintena de municipios del sureste mexicano que están en su poder La inmensa mayoría de los más de 5.000 asistentes al acto eran indígenas, hombres, mujeres y niños, muchos de ellos encapuchados, vistiendo trajes tradicionales, hablando tzotzil o cualquiera de los dialectos del antiguo maya A su lado, dispuestos a ayudar pero sobre todo a encontrarse entre ellos, a debatir apasionadamente sobre la guerra en Irak o la política de sus respectivos países, mexicanos, europeos y estadounidenses lucían blancos, de cabello rubio, con ropas informales, piercings y tatuajes a la última moda El contraste era sorprendente, pero la convivencia respetuosa, como si cada uno de los grupos humanos supiera su lugar: los habitantes de Oventic (apenas 100) y sus "hermanos" de otras comunidades recibían a los huéspedes, les indicaban con señas donde acampar o ducharse Los jóvenes antimundialización, algunos de ellos venidos expresamente a Chiapas para la ocasión, les ayudaban en los interrogatorios de la entrada, hacían graffitis en las paredes del pueblo, y sobre todo, eran conscientes de su papel de "escudos humanos" ante una posible presencia militar "Ibamos a ver otras comunidades, pero en cuanto supimos lo de Oventic venimos a contribuir a la resistencia indígena", señaló Jessie M., una joven delegada de la organización estadounidense Global Exchange La figura del subcomandante Marcos, uno de los íconos del movimiento antiglobalización, atrae como un poderoso imán a estos jóvenes occidentales ávidos de experimentar otras formas de convivencia, de política Para Mariah Mursell, británica, no hay diferencias: "es un conjunto de personas que trata de luchar contra la injusticia en el mundo. Y es también una fiesta". Acostumbrados a viajar y a expresar libremente sus ideas, estos huéspedes contrastaban claramente con la gravedad solemne de los indígenas, su timidez, quizás aumentada por las consignas de no hablar con la prensa. "No sé" o un gesto con la cabeza es la respuesta a menudo de estos habitantes ancestrales de los Altos de Chiapas ante el "blanco" que pregunta. Los niños sonríen y se acercan sin dificultad. Los voluntarios más perspicaces les enseñan juegos, hablan con ellos, ayudan a las mujeres. "Las palabras son fáciles. Cómo se debe presentar una idea, un proyecto ante ellos, ese es el problema", asegura Jessie, que lleva dos años trabajando en Chiapas. (AFP)

¿Marcos estuvo en EE. UU.?

El jefe de la guerrilla del EZLN, el subcomandante Marcos, estuvo hace una semana en Ciudad de México y antes viajó de manera clandestina a Belice, Guatemala y Estados Unidos, informó este sábado el diario capitalino El Independiente, citando fuentes de seguridad. "Sin máscaras y acompañado de tres personas, (Marcos) viajó clandestinamente de (el sureño estado de) Chiapas a la capital entre viernes y sábado (1 y 2 de agosto) y gastó alrededor de 2.000 dólares en aparatos para copiar discos compactos, una editora de video para computadora, decenas de CD's y sofware", afirmó el rotativo El Independiente, que dijo haber consultado fuentes del Centro de Investigación y Seguridad del Estado (Cisen), añadió que el líder guerrillero regresó a Chiapas el lunes pasado. (DPA)

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