Las cifras del desempleo desalientan la posibilidad de EE. UU. de crecer

Las empresas continúan expulsando trabajadores y la tendencia no parece revertirse.

WASHINGTON (AFP).- Las cifras sobre el desempleo en Estados Unidos en julio desalentaron las esperanzas de una rápida reactivación de la economía, a pesar de los buenos indicadores que parecen apuntar nuevamente al crecimiento. La tasa de desempleo bajó a 6,2% en julio contra 6,4% del mes anterior, pero ello no se explica por la creación de nuevos empleos.

Por el contrario las empresas suprimieron 44.000 puestos de trabajo el mes pasado, luego de barrer otros 72.000 en junio Estas cifras en apariencia contradictorias se deben a la fuerte baja de la población económicamente activa (-556.000) y a que una gran parte de los desempleados resolvió abandonar la búsqueda de trabajo ante las magras perspectivas. "Es verdaderamente desalentador", resumió Sung Won Sohn de la banca Wells Fargo.

A pesar de ello, una ola de buenas noticias parece delinear el contorno de una reactivación económica. El crecimiento fue sorpresivamente bueno en el segundo trimestre (+2,4%), las inversiones de las empresas se movilizan y las inscripciones semanales de los desempleados vienen en retroceso desde mediados de julio. "Pero aunque algunas cifras son buenas, muchas personas siguen desempleadas", opinó ayer el presidente George W. Bush. "Continuaremos trabajando sobre la economía hasta que esas personas encuentren trabajo", agregó.

Desde el comienzo del año, la economía estadounidense perdió 486.000 empleos, con una verdadera hemorragia en el sector industrial que suprimió 56. 000 puestos el mes pasado En total, más de 2,6 millones de empleos desaparecieron en el sector en un lapso de dos años y medio. Frente a este panorama la bolsa estadounidense cerró ayer con pérdidas. Wall Street retrocedió 0,86% y el Nasdaq perdió 1,12%.

El sector aéreo, que atraviesa la más grave crisis de su historia desde el 11 de setiembre de 2001, suprimió 9.000 empleos en julio, mientras que el comercio minorista redujo el número de empleados por tercer mes consecutivo. Ante esta situación desesperadamente aletargada se pergeñan dos tesis. Ya sea que el empleo no reaccionó aún porque evoluciona siempre con cierto retraso en función de las variables económicas, o que la reactivación que se percibe sufrirá de una debilidad considerable.

La reactivación puede continuar así el camino que emprendió desde el fin de la recesión en noviembre de 2001: una reactivación débil y sin empleos.(AFP)