Sábado 23 de agosto de 2003
 

Hipótesis de la elección
en la ciudad de Buenos Aires

 

Por Ricardo Rouvier (*)

  a elección del próximo domingo, para jefe de gobierno, diputados nacionales y legisladores locales, pone en juego distintos niveles de la política nacional. Considerando la importancia que tiene la Capital Federal, por su resonancia, la elección pasa a ser un tema que comprende también a la marcha del gobierno de Kirchner. Mucho más sensible esto a partir de producirse el primer conflicto entre el presidente y el vicepresidente, que tiene dos lecturas: una formal, expresada por la misión y función de cada uno y la jerarquía diferenciada; y la otra, lo que está en el fondo de esta disputa personal, sobre la existencia de más de un proyecto en juego. La afirmación de una línea de centro izquierda de Kirchner genera inquietud en otros sectores, inclusive del justicialismo, que observan una suerte de desperonización del gobierno.
Con respecto a las elecciones del próximo domingo y, evitando caer en el estilo deportivo que en cada elección sobresale en lo mediático, vamos a establecer conceptualmente lo que nuestro estudio conoce de esta confrontación:
a) Va a haber segunda vuelta electoral, a pesar de que los dos principales candidatos (Ibarra y Macri) reúnen casi el 70% de los votos.
b) Los ejes principales que se ponen en juego en las elecciones del domingo son dos: la gestión de Ibarra y la imagen pública de Mauricio Macri. Esto quiere decir que ambos candidatos reúnen aspectos positivos y negativos que se contrapesan y que van a decidir finalmente la elección.
c) Es importante señalar algo que no se indica frecuentemente por el eclipse que provoca la hegemonía de las imágenes por encima de lo propiamente conceptual, que estas elecciones expresan dramáticamente el estado de fragmentación de la política nacional, si bien se observa cierta recuperación bajo el paraguas de la buena imagen del presidente. Retazos de las organizaciones políticas se encolumnan detrás de los candidatos, salvo la izquierda que muestra mayor homogeneidad, aunque no se espera que hagan una gran elección.
d) La evolución de los votos indica que el próximo domingo habrá un empate técnico, con una leve diferencia a favor de Macri por encima de Ibarra, en razón del fuerte crecimiento que experimentó el actual jefe de gobierno en el último mes y medio. El crecimiento de Macri ha sido más lento.
e) La segunda vuelta podrá ser medida de mejor manera una vez terminada la primera. No obstante, Ibarra mejora su performance en el ballottage debido a que la mayoría de los votos de Zamora, Vilma Ripoll y parte de los votos de Caram y de Bullrich engrosan las posibilidades del actual jefe de gobierno en su reelección.
f) Como en cualquier elección, también en la Ciudad de Bs. As. hay aspectos impredecibles que no entran en el cálculo de medición y es el papel de los punteros que en este distrito operan todavía sobre las zonas pobres (Villa 21, 31, Villa Soldati, La Boca), que fueron detectados por nuestros encuestadores. Esta acción termina disciplinando a sectores que en las encuestas responden con cierta libertad.
g) Bullrich ha hecho una alianza con Recrear que no va a resultar muy efectiva, ni para ella ni para López Murphy, que permanece bastante alejado del escenario nacional y que está perdiendo visibilidad.
h) El radicalismo no hará una buena elección, aunque posiblemente Nito Artaza obtenga más votos que Caram por el corte de boleta a favor del candidato a diputado. Además, es probable, según lo manifestado por los entrevistados que Bonasso obtenga su banca, pero que la lista más votada sea la del oficialismo encabezada por Lozano.
i) En términos de imagen se enfrentarán en la segunda vuelta la gestión de Ibarra vs. la imagen de Macri, tanto en sus aspectos positivos como negativos. Mientras no hay un consenso mayoritario favorable en relación con el estado de la ciudad, pesan en Macri los antecedentes del grupo empresario familiar. Si el voto anti Macri es más fuerte que la descalificación de la gestión de la administración actual, las posibilidades de Ibarra crecen.
j) En nuestra opinión, Macri tiene que hacer un esfuerzo mayor que Ibarra para ganar. Debería obtener una diferencia importante en la primera vuelta para contrarrestar el avance de Ibarra después.
k) Por el contrario, si Ibarra ganara el domingo, aunque sea por una pequeña diferencia, las posibilidades de Macri estarían seriamente en peligro, porque no tiene muchos votos más para sacar de los otros candidatos.
l) En los últimos dos días se ha producido un hecho que puede llegar a tener un efecto negativo sobre Ibarra y se trata del conflicto entre el presidente y Scioli. Pero esto es una hipótesis que, hasta el momento de escribir estas notas, no está corroborada ni negada. Hasta el día de hoy, más del 50% de los porteños consideran que lo que pasó es perjudicial para la gobernabilidad, sin haberse constatado todavía un efecto de fuga de votos de Ibarra.

(*) Sociólogo consultor
     
     
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