Desvalijaron escuela que tenía rejas y alarma

ALLEN (AA).- Blanco de osados delincuentes, que lograron sortear en forma violenta varias rejas, ventanas, puertas y hasta la alarma de seguridad, una escuela primaria ubicada en la zona norte de esta ciudad fue prácticamente desvalijada el fin de semana Los asaltantes se llevaron computadoras, un televisor de 29 pulgadas, una videograbadora, alimentos y hasta ropa de la Escuela Nº 335, en la cual estudian más de medio millar de niños.

La sala de computación equipada con una decena de equipos informáticos quedó inutilizada a partir del robo de la totalidad de los CPU, algunos monitores e impresoras. El área de video corrió la misma suerte, porque los malvivientes también se alzaron con un televisor de 29 pulgadas y una videograbadora.

Pero no conformes con el botín, los ladrones causaron múltiples destrozos y saquearon hasta la despensa y la cocina, llevándose una importante cantidad de alimentos -harina, fiambres, yogures, etc.- y utensilios. Además, rompieron un armario y se apropiaron de prendas de vestir usadas que habían sido donadas y juntadas "a pulmón" para poder ayudar a los chicos que necesitan abrigo para pasar el invierno.

Ayer, el panorama en la Escuela Nº 335 ubicada en el barrio Colonizadora del Sud era desolador. Una de las ventanas del sector posterior resguardada con rejas por dentro y por fuera, y que da al patio interior de la escuela, estaba destrozada. Los malvivientes -se estima que fueron varios por la cantidad de elementos que sustrajeron- ingresaron por allí y luego rompieron otros vidrios y puertas para poder llegar a la cocina y al resto de las dependencias.

Según enumeró ayer al mediodía la vicedirectora del establecimiento, Claudia Villacorta, angustiada y con impotencia, a primera vista faltaban dos equipos completos de computación, la mayoría de los CPU, dos impresoras, un televisor y la video. Además, algunos monitores estaban desparramados por el suelo.

En el sector de la cocina y la despensa, los delincuentes se alzaron con una bolsa de harina de 50 kilos, que es utilizada para elaborar el pan para los chiquitos -la mayoría de hogares humildes- que allí asisten. También en el robo perdieron otros alimentos, vestimentas y "hasta los matafuegos", se comentó.