CASO DEL FRARI

Ordenan la detención de un vendedor ambulante

Dos huellas dactilares que le pertenecen, fueron halladas en el consultorio de la kinesióloga Diana Del Frari. Su último domicilio era en Neuquén, pero creen que está en Chile. Lo podrían indagar como coautor

Los investigadores encontraron una huella dactilar de Fabián Vera Acuña en el baño del laboratorio de la víctima, y una restante en una mesa.

CIPOLLETTI (AC).- El nuevo sosechoso en el caso Del Frari es Fabián Mauricio Vera Acuña, un vendedor ambulante de 29 años que podría ser indagado como coautor del delito de homicidio. El sujeto vivía en Neuquén hasta hace unos meses y ahora está prófugo. Los investigadores presumen que podría estar oculto en Chile.

Hace un mes la querella informó que el juez Juan Torres había ordenado la detención de un individuo a partir de los rastros hallados en el interior del consultorio de la kinesióloga. Se dijo entonces que se trataba de una persona de unos 30 años que había estado en algún momento detenida en Cipolletti y que había huellas que la vinculaban en el caso.

Ayer trascendió que el sospechoso se llama Fabián Mauricio Vera Acuña, y que dos son las improntas halladas en la escena del crimen que lo comprometerían en el hecho: una encontrada en los azulejos del baño del consultorio y otra en una mesita que estaba en el pasillo de la misma propiedad.

Diana Del Frari fue asesinada el 14 de agosto de 2001 en su lugar de trabajo, en la calle 9 de Julio y Libertad de Cipolletti. Fue brutalmente apuñalada y golpeada en el sector del baño y el pasillo de su consultorio.

Por el homicidio no hubo imputados durante más de un año de investigación. Fue recién con el desembarco en la zona del móvil de Gendarmería Nacional cuando comenzaron a surgir novedades.

A partir de las pericias realizadas, en diciembre de 2002 surgió el nombre de Enzo Pérez, un preso que fue asesinado en la alcaidía de Roca Poco después se dio a conocer oficialmente la vinculación de este hombre en el asesinato.

Gendarmería había identificado otras improntas, entre ellas algunas que correspondían a familiares de la víctima, y otras, que oportunamente se informó que pertenecían "a una persona que se había acercado a colaborar" La querella entendió que un sujeto cuyos rastros eran sospechosos debía declarar en la causa. 

Detenido en Cipolletti

Estas improntas pertenecían a Vera Acuña, un hombre que aproximadamente en agosto o setiembre de 2001 había estado detenido en Cipolletti. En base a la identidad que se logró por medio del cotejo, el abogado que representa a la familia de la kinesióloga solicitó en febrero de este año que el vendedor ambulante fuera llamado a indagatoria.

El Juzgado no hizo lugar al pedido. "Téngase presente", fue la respuesta de Torres cuando el querellante requirió la detención. Fue después de la presentación de un recurso de revocatoria cuando el juez ordenó la aprehensión de Vera Acuña.

Esta medida se concretó el 10 de julio pasado Como el hombre vivía en Neuquén, intervino el juez Roberto Avelleira, quien pidió un allanamiento en el domicilio del sospechoso. Pero Vera Acuña ya no estaba allí cuando fueron a buscarlo.

El vendedor ambulante fue citado a declarar en la causa. Según una fuente consultada sería indagado como coautor del homicidio de la kinesióloga en base al artículo 79 del Código Penal (homicidio simple), aunque desde el Juzgado se informó que la calificación legal se dará después. "Ahora sólo se lo llama a declarar", se indicó Vera Acuña estuvo detenido en Cipolletti porque algunos vecinos del barrio El Manzanar, un sector residencial de la ciudad, lo consideraron sospechoso y llamaron a la Policía Sus huellas formaron parte del universo de rastros a investigar, como los de otros sujetos que en algún momento estuvieron detenidos en Cipolletti. Así surgió la identidad de este individuo que vendía cuchillos.

Hasta ahora no se pudo determinar si este nuevo sospechoso y Enzo Pérez se conocían  

Malestar de la familia con la Justicia

CIPOLLETTI (AC).- "Estamos muy molestos con el accionar de la Justicia porque trató este tema (la detención del nuevo sospechoso) como si hubiese sido un simple ladrón de gallinas", expresó ayer Pablo Scilipotti, marido de la kinesióloga asesinada.

Mañana se cumplen dos años de la muerte de Diana Del Frari y para los familiares de la víctima, la Justicia no actuó con la celeridad deseada.

En el caso del nuevo imputado en la causa, la bronca de Scilipotti proviene desde hace bastante tiempo.

El mes pasado, cuando se dio a conocer que el juez Torres había ordenado una detención, el marido de la kinesióloga cuestionó "la demora" en tomar esta medida. Scilipotti recordó que la identidad del sujeto (ahora se sabe que es Vera Acuña) se conoció en febrero, pero recién en julio el magistrado hizo lugar al pedido de detención. "Es como que la justicia tenía una hipótesis de trabajo y no le dio la importancia que debía al caso", mencionó Scilipotti con respecto al nuevo imputado.

Dijo además que antes de que se ordenara la aprehensión de este individuo, los investigadores policiales "fueron a preguntar en su domicilio" en Neuquén. Cuando la orden salió, el sospechoso ya no estaba.

Scilipotti, a pesar de su malestar, dijo que prefiere no calificar el accionar del Juzgado de Instrucción 8.