Básquet

El subcampeón recibió un cachetazo en su ego

Cayó ante Venezuela de manera increíble. Debe ganarle a Dominicana para evitar el Dream Team.

Fabricio Oberto jugó bien en el comienzo, pero después el equipo perdió el rumbo y en un final increíble fue derrotado por Venezuela.

Jugó a media máquina y controló el desarrollo durante 39 minutos, pero se olvidó de un detalle: los partidos de básquet duran 40. Ayer, Argentina cometió todos los errores juntos en los últimos 60 segundos y perdió un cruce increíble ante Venezuela por 97-92 (38-46), en el Preolímpico que se disputa en San Juan de Puerto Rico.

Hoy, el equipo de Rubén Magnano medirá fuerzas con República Dominicana y deberá cantar victoria para terminar segundo o tercero. Si lo logra evitará enfrentar al Dream Team en las semifinales de esta competencia que otorga tres lugares para los Juegos Olímpicos de Atenas 2004. En otro de los encuentros, Canadá superó a los dominicanos, por 78-75, y está con un pie entre los cuatro mejores.

El 90-83, a un minuto y medio del cierre, parecía definitorio, pero no fue así. Se cometieron errores infantiles, con salidas insólitas debajo del aro y Venezuela no dejó pasar la oportunidad. Cuando faltaban 53 segundos para que suene la chicharra, pasó al frente (93-91) y en el reparto de libres consumó una verdadera hazaña.

Hasta ese momento, Argentina no pasó mayores sobresaltos. El técnico cordobés rotó el plantel permanentemente, le dio más minutos a Lucas Victoriano, Federico Kammerichs o Gabriel Fernández, quienes no desentonaron y aprovecharon su chance de mostrarse.

La señal de riesgo se dio cuando Magnano empezó a recurrir a los habituales titulares en el cuarto final. Todo pintaba para un cierre tranquilo, pero de repente aparecieron en cancha Emanuel Ginóbili, Fabricio Oberto, Andrés Nocioni y Pepe Sánchez, y fueron ellos, los más experimentados, los que cometieron los errores en las pelotas decisivas.

El escolta de San Antonio Spurs no encontró receptores, falló en dos salidas consecutivas y Venezuela se encontró con la oportunidad de dar vuelta un partido que siempre estuvo perdido, con una desventaja que llegó a ser de 17 puntos y que mantuvo una media de 8/10.

Después de la gran producción ante el Dream Team, Argentina dio un paso en falso. Es verdad que sus chances de ir a Atenas están intactas y que tenía margen para permitirse una derrota, pero no tomó el partido con la seriedad necesaria. Si algo caracterizó al proceso Magnano es que siempre salió a dejar el alma, aún en los amistosos. Ayer ocurrió todo lo contrario. Así le fue. (AN)