Sábado 2 de agosto de 2003

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Meolans transportó el sueño en el Centro Olímpico

El abanderado de la delegación argentina fue el primer atleta en ingresar al estadio.

Los equipos albicelestes de hándbol, básquet, hockey y waterpolo salen al ruedo.

 

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José Meolans, la bandera argentina y el resto de la delegación ingresando al Centro Olímpico. "Fue un momento único e inolvidable", dijo el nadador cordobés.

El "carnaval dominicano" se escuchaba desde los cuatro costados hasta que los primeros aplausos evidenciaron el ingreso del primer atleta al Estadio Olímpico de Santo Domingo. Era José Martín Meolans, el abanderado de la delegación argentina que abrió la ceremonia inaugural de los XIV Juegos Panamericanos.

La fiesta comenzó con una muestra de ritmos típicos de la República Dominicana que acompañaron al nadador cordobés durante su recorrido por la pista de atletismo, delante del resto de la delegación albiceleste.

La ceremonia se extendió durante tres horas, pero quizás el momento más esperado para los argentinos fue la aparición de la espigada figura del cordobés al frente de la delegación nacional, conformada por 370 atletas. "Fue un momento único, inolvidable", reconoció el atleta.

Todos transitaron la pista del estadio principal de los Juegos. El cordobés, que aparece como una de las grandes figuras que tendrán los Panamericanos, llegó ayer por la mañana a República Dominicana, procedente de Miami, con el único propósito de asistir a la fiesta de apertura Detrás de él desfilaron casi todos los integrantes de la delegación argentina -hubo ausencias obligadas como la de Juan Curuchet, quien está compitiendo en el Mundial de pista de Alemania (ver aparte)- entre los que se destacaron las figuras más representativas: Cecilia Rognoni, la mejor jugadora de hóckey sobre césped del mundo; Jorge Lombi, el implacable goleador del equipo masculino del mismo deporte; y el plantel completo de fútbol que dirige Miguel Angel Tojo.

Detrás de la delegación argentina aparecieron los atletas de los otros 41 países que llegaron con el mismo sueño panamericano.

El desfile fue precedido por una muestra de "carnaval dominicano" y luego sucedido por los actos formales. Se izaron las banderas del Comité Olímpico Internacional (COI), de la Organización Deportiva Panamericana (ODEPA) y de la ciudad de Santo Domingo El presidente de la ODEPA, el mexicano Mario Vázquez Raña, declaró la apertura oficial de los Juegos y más tarde pronunció su discurso el presidente dominicano, Hipólito Mejía, el principal impulsor de estos Juegos ante una virulenta oposición política, incluso de su propio partido Luego llegó uno de los momentos emotivos: la entrada de la antorcha panamericana, que fue portada por figuras históricas, y otras en actividad, del deporte dominicano Exhibidos los 5.200 atletas frente al público, encendido el pebetero, consumados los discursos políticos, multiplicadas mil veces las imágenes por televisión, vendida y facturada la publicidad; ahora se abre el espacio para el deporte. (AR/Télam)

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