La peña

De qué se trata

Me preguntaba en qué rubro podría incluirlo dentro de los intérpretes argentinos. Y la verdad es que no pude averiguarlo. No es fácil hacerlo porque para encasillarlo debiéramos definir bien a qué año del cantante nos estamos refiriendo. Digo esto porque sus cambios a la hora de elegir repertorio son asombrosamente rápidos.

Pocos días atrás tuve la oportunidad de ver en televisión una parte del recital que dio en Buenos Aires Luciano Pereyra y se me ocurrió escribir sobre él, intérprete al que desde hace tiempo quiero dedicarle unas líneas porque muchos lo asocian directamente con el folclore, pero que no me terminaba de encajar en lo que, desde mi criterio, se puede incluir en este rubro.

Y terminé de confirmar que efectivamente el joven está a esta altura más dedicado a géneros varios que al folclore por el que se hizo conocido.

Usted se preguntará por qué razón hablo de él si no forma parte de quienes integran la enorme legión de folcloristas a los que refiere esta columna.

Y la verdad es que en cierto modo lo fue y lo es. Algo de folclore hace, siempre alguna zamba o alguna canción forman parte de su repertorio. Ni bien ni mal. Me parece que para quienes alguna vez deciden ir a un recital o comprar su música, siempre es bueno definir qué canta un intérprete.

Y para que vean que no se trata de un capricho mío, consulté en algunas disquerías, visité sitios de internet y muy pocos tienen a Luciano Pereyra como intérprete del folclore. Es más, si yo tuviera que ubicarlo en algún rubro, francamente no sabría si es un cantante folclórico, si es romántico (puede serlo de ambas cosas) o si su música se encuadra en otro género que no alcanzo a definir.

¿A qué viene todo esto?. A que quienes nos acostumbramos a ver a Luciano Pereyra, nos guste o no, en festivales indiscutiblemente folclóricos como Jesús María, Cosquín y tantos otros, fuimos viendo cómo en poco tiempo fue cambiando su repertorio para meterse en un género que no es fácil de encuadrar por la multiplicidad de música que elige en cada recital.

Estoy convencido de que no hay cantante que pueda abarcar todos los estilos y géneros y por eso mismo es que no creo en los cantantes que dan recitales tan variados que a lo mejor nos gustan en parte y nos tenemos que bancar el resto que no es lo que fuimos a ver.

Claro, sus últimos recitales fueron colmados por el público, buena señal de que hay seguidores para este estilo que, en todo caso es una mezcla para públicos muy diferentes que van de lo romántico tradicional a la zamba y sin dejar de lado el tango. En síntesis, muy buena voz, buen despliegue escénico, pero con repertorio tan amplio que no podríamos incluirlo en la larga lista del folclore Creo, humildemente, que la explicación está en que la fórmula le dio buenos, muy buenos resultados y cada recital suyo es sinónimo de éxito. Si es folclore o no sólo nos importa a unos pocos.

Jorge Vergara

jvergara@rionegro.com.ar