Hermanos unidos en la música

Por primera vez Emilio y Félix Peroni en concierto en Cipolletti

Félix y Emilio Peroni esperan con ganas tocar hoy para su gente.

CIPOLLETTI (AC).- Emilio Peroni es un concertista de piano consagrado aquí y en el extranjero. Tocó en el Colón de Buenos Aires, en tradicionales salas de América y Europa, y regresó por pocos días de Alemania, donde se encuentra desarrollando una etapa de perfeccionamiento que le abrirá nuevos horizontes. Su hermano, Félix Peroni, reside desde hace varios años en Buenos Aires, es un eximio ejecutante de viola y ganó, por concurso, un puesto en la Orquesta Sinfónica Nacional. Hoy, el público local y de todo el Alto Valle tendrá la oportunidad de apreciar el talento de los dos tocando juntos, y también algunas piezas por separado, en un concierto que se llevará a cabo en el auditorio del sindicato de Luz y Fuerza, en Belgrano 945 de Cipolletti, desde las 21.30.

La apertura será de Emilio, con piano, luego será el turno de Félix, en viola, con un cierre de los dos en varios temas.

El repertorio consta de piezas de música clásica y también del cancionero popular argentino. Scarlatti, Chopin, Scriabyn, Guastavino, Ramírez, Gershwin, Schumann, Glasunow, Szymanowsky y Piazzolla son los grandes que se verán reflejados en el piano y la viola de Emilio y Félix Peroni.

Emilio, como es su característica, hará comentarios breves sobre las obras. "Con estas pequeñas charlas la gente se siente más cerca de la música", comenta este joven de 26 años que desde su graduación en la Escuela Superior de Música del Neuquén recorrió un largo camino que lo está colocando en en lo más alto de la consideración de los expertos y el público.

Emilio Peroni vive desde abril del 2002 en Rostock, una ciudad alemana lindante con el mar Báltico. Allí despliega una carrera de perfeccionamiento pianístico con el afamado maestro Bernd Zach, que se prolongará hasta el 2006, involucrando a los compositores más distinguidos. No tiene beca municipal ni provincial, -algo insólito, por su rango de embajador cultural de esta zona, su prestigio y sus esfuerzos, infructuosos, por lograr un apoyo concreto- y se costea su estadía y estudio dand clases, aparte del aval que recibe en Rostock.

Le dedicó Emilio una preparación especial para el primer concurso en homenaje al centenario del nacimiento de Claudio Arrau, en Chillán, Chile. Llegó al suceso previa selección por video y se enteró de que había 9 seleccionados de todo el mundo, él entre ellos. "Fue todo un honor", comenta con inocultable orgullo.

En Rostock, Emilio absorbió los idiomas de inglés, italiano y alemán, y en varios conciertos suyos incluyó obras argentinas, como tangos y zambas. "Veo en el mundo un apasionamiento grande por el tango. Es un símbolo, una patente argentina en el exterior", subraya. Su estudio en Alemania le insume casi 9 horas diarias. También viajó a Sicilia y Andorra para concursos internacionales. "Las experiencias son siempre favorables porque permiten que uno se evalúe respecto del nivel de otros ejecutantes", reflexiona. Félix lo visitó para el segundo encuentro de la Orquesta de Juventudes Musicales de Berlín, aunque ya habían viajado en el 2001 por Asia. En Alemania Emilio programó una serie de conciertos con su hermano que le sigue los pasos en dedicación y nivel ejecutorio.