Barenboim acerca a árabes e israelíes

El pianista y director de orquesta argentino-israelí Daniel Barenboim, un apasionado de la música y la política, acerca a árabes e israelíes en taller musical West Eastern Divan que dicta en estos días en Andalucía. Barenboim siente que su objetivo estará cumplido cuando la orquesta que surja del taller pueda tocar en un país árabe.

Daniel Barenboim tiene la esperanza de poder tocar pronto en un país árabe.

SEVILLA, España (DPA).- En un rincón de la sala climatizada que utiliza para descansar y reunirse con su equipo en la residencia Lantana, de la localidad sevillana de Pilas, Daniel Barenboim termina de leer lo que tenía entre manos. Entonces se acerca, descalzo, hasta el lugar donde hará la entrevista. "¿Habéis estado en el ensayo, no?", es lo primero que dice el consagrado pianista y director de orquesta argentino-israelí A sus 60 años, Barenboim está de nuevo este agosto al frente de la West Eastern Divan, la orquesta de jóvenes músicos árabes (palestinos, libaneses, sirios, egipcios...) e israelíes, tratando de aunar la música con la mutua comprensión entre los pueblos tradicionalmente enfrentados La música y la política lo apasionan. Y de algún modo confluyen en este taller. Aunque él puntualiza: "Este taller no es un taller político, pero a pesar de ello demuestra que cuando los diferentes pueblos de la región (de Cercano Oriente) se unen para crear algo juntos, (lo que surge) tiene una calidad extraordinaria" Pero "la música no va a resolver el conflicto", dice quizá con cierto pesar. Barenboim y su amigo, el intelectual palestino Edward Said, llevan cinco años realizando esa unión entre pueblos enfrentados La primera edición del West Eastern Divan tuvo lugar en la ciudad alemana de Weimar. Este año se celebra en Andalucía por segundo año consecutivo, y allí tendrán también lugar las próximas ediciones "Estudiar la música es mucho mejor que estudiar el fundamentalismo, tanto para los unos como para los otros", afirma rotundo el director de la Staatskapelle de Berlín refiriéndose a israelíes y palestinos Dice de las sinfonías de Beethoven que son "una concepción de la vida" y habla de las crisis de la música clásica hoy en día. "Se encuentra al margen de la vida intelectual o espiritual", lamenta, y critica que no entre en la vida de "la gente que trabaja con el cerebro", como abogados o médicos "La música tiene que ser parte de la cultura general", reivindica, porque "a través de la música s puede aprender mucho sobre el mundo". El maestro Barenboim, que asegura que el taller le ha cambiado la vida -"he aprendido que hay muchas cosas que parecen imposibles y que en realidad son muy factibles"-, pasa en numerosas ocasiones durante la entrevista de hablar de música a hablar del conflicto en Cercano Oriente, mirando siempre a los ojos de su interlocutor "Israel se tiene que reinventar, el pueblo palestino se tiene que reinventar, cada uno a su forma. No es sólamente necesario, sino posible", dice buscando una solución a un conflicto de décadas. El nuevo plan de paz, la llamada "hoja de ruta", no parece gustarle del todo "No creo que se esté yendo por el buen camino", pero "el hecho de que haya diálogo, aunque no sea muy bueno, ya es una buena señal". Y advierte de que la "hoja de ruta" debe ser tomada "como un impulso, no como un fin". Para la solución del conflicto, el prestigioso pianista apunta hacia Israel "Debe tener un grado mayor de responsabilidad", dice, porque los israelíes ganaron su identidad en 1948 y los palestinos no. "La solución no pasa sólo por razones únicamente nacionalistas, sino diría yo casi de justicia social". "Los palestinos han tenido en parte un destino muy parecido al de los judíos", señala casi como retando a quienes en algún momento lo han criticado por su actitud "Yo no me considero antiisraelí", dice, "todo lo contrario, yo quisiera ver un Israel con una nueva visión de cooperación y colaboración con los palestinos" El maestro, nacido en una familia descendiente de judíos rusos que en 1952 se mudó de Buenos Aires a Israel, critica que este país "depende demasiado aún del resto del mundo" y "económica y militarmente de los Estados Unidos". "Yo estaría mucho más orgulloso como israelí si Israel pudiese crear junto con sus vecinos algo propio" Esa es la "visión patriota" que tiene sobre su país, a cuyas autoridades critica por estar levantando una valla de seguridad en la frontera con Cisjordania. "El muro", dice, "se construye no con un sentimiento de fuerza, sino de debilidad", e inmediatamente después pasa a criticar también los atentados suicidas palestinos "La violencia de los suicidios palestinos parece como que demuestra fuerza, pero la realidad es que en el mejor de los casos es un acto de desesperación", señala Vuelve Barenboim a hablar de su taller musical de jóvenes de Cercano Oriente. Y cuando se le pregunta si se han cumplido todos los objetivos que se impuso con el West Eastern Divan, dice si dudar: "No, todavía no" Se cumplirán "el día que esta orquesta pueda tocar en todos los países que están representados en ella". "El primer país árabe que nos acoja va a dar un paso muy importante", asegura.

Dispuesto a tocar en Malvinas

El pianista y director de orquesta argentino-israelí Daniel Barenboim se mostró favorable a tocar en las islas Malvinas si ello puede "ser útil" y expresó que ya le manifestó su predisposición sobre el tema al canciller Rafael Bielsa. Barenboim explicó que le dejó en claro a Bielsa que "si en alguna forma" puede "ser útil yendo a tocar a las Malvinas durante un viaje a Buenos Aires" lo haría "con mucho gusto" El director negó además que tenga el proyecto de crear una orquesta de las Islas Malvinas con músicos argentinos, ingleses y malvinenses al estilo del taller que estos días reúne en Sevilla a jóvenes músicos árabes e israelíes "Yo no propuse una orquesta de las Malvinas", aclaró Barenboim, con lo que descartó una supuesta intención de crear esa orquesta que la prensa argentina había difundido en junio El ministro Bielsa "alabó mucho este taller" del West Eastern Divan, comentó el pianista, sobre la conversación que mantuvo con el canciller. Según Barenboim, Bielsa le preguntó si no sería posible un proyecto similar sobre las Malvinas. El músico comentó haberle contestado al ministro que "eso no se repite", pero que de todos modos le explicó que no tendría problemas en tocar en las islas. (Télam-SNI).