La hoguera

Sur o no sur

"Sin darse cuenta, y ese es el tema, uno se va metiendo en problemas" Quién diría que me iba a gustar Kevin Johansen! Que de un día para el otro se iba a convertir en mi gurú.

Sur... Barda y después.

Vino a visitarme. Llegó tarde. Trajo un poco de olor porteño, fotos y un anillo de regalo. Le mostré el Valle de la Luna. Se nos secó la boca. No fue el clima ni el polvo, fue la charla que no paraba. Fue la verborragia de la amistad de cuando todo quiere oirse y decirse y opinarse Después de tres horas cuarenticinco minutos, paramos. Descubrimos el silencio, el viento casi imperceptible y el rojo de la tierra. El plexo se detuvo Volvimos. Trepamos, caímos y posamos para el disparador automático.

Nos agarramos la mano, nos reímos.

El río le pareció intenso El hambre. El hambre nos llevó a Neuquén. Quería ahumados porque estamos en la Patagonia! Pero nos conformamos con unos sandwiches mexicanos. Y más y más cháchara.

Volvimos. El atardecer era muy rosa y casi nos tenemos que tirar a la banquina. Malditos que-se -mandan-a-pasar-en-las-curvas.

Más tarde la compañía de un vino "de la zona", porque ella quería embeberse de lo auténtico.

Casino. Nuevo. Mesas. Mejor no.

Después vueltas y vueltas sin destino. Hasta que vimos luz La luz tenía gente, la gente fumaba, fumaba mucho, y la banda tocaba, y tocaba muy bien.

Canabislito. Y sus manos sobre las cuerdas Y el viaje hacia esos dedos que golpean y acarician.

Ella quería seguir escuchando, pero cabeceaba en la mesa. Nos fuimos.

Y nuestra casa resultó ser acogedora y calentita Al día siguiente ya la angustia era nudo. Estábamos de nuevo cerca de ese hasta luego. Sí, sí, habrá más mails, llamados y las saudades de esos ojos verdes risueños y tristes A veces es como mirarme a mí misma.

Ella me trajo la sorpresa y un CD de Kevin con su música sonriente.

"Y cuando te mudes a un nuevo pueblo y realices un nuevo duelo... Daisy, te prometemos, que adonde vayas todos te visitaremos".

Daisy es la canción de un travesti que tiene problemas con la "cana" y por eso tiene que mudarse de pueblo.

Tomo notas en mi libreta.

Ella también escribe. ¿Cosas que le dije? ¿Letras de canciones? ¿Impresiones roquenses? ¿Sueños para ser psicoanalizados?

Eso también es literatura. Un diario de viaje, una carta de amor prohibido, un mail juguetón. Una verdad a medias que a veces desgarra y otras transporta.

Podría ser también simplemente un grito desgarrador. Incontenible Nadie está obligado a escucharlo.

Pero a escribir... Las palabras a veces simplemente tienen que estrellarse en la hoja. Es una cuestión de destino: no hay opción.

Ella al final tuvo que irse. Antes probó un famoso de crudo y queso con pan de pizza. Hasta hubo tiempo para fantasear con criar a nuestros hijos juntas! Porque los primeros van a ser varones... Son más buenitos...

Dice que se llevó el canalito, el perro que se puso para la foto, la cara rojiza de tantas charlas al sol, el cielo (qué bueno que casi no hay edificios! Mirá la luna, mirá la nube) Tomá un poco de los famosos vientos del sur. Están de moda!

Quedate, llevame, andá Hasta luego Ceci  

       Nuria Docampo Feijóo

ndocampo@rionegro.com.ar