Viernes 1 de agosto de 2003

Carmina Cannavino, la chica del viento

Con un amplio repertorio de folclore latinoamericano, la intérpetre peruana Carmina Cannavino se presenta hoy en la Casa de la Cultura de Roca y mañana en el Teatro de la ciudad de Neuquén, siempre a las 22. Una voz cálida que estará acompañada por el pianista Darío Eskenasi.

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Carmina Cannavino respeta la raíz de los temas que interpreta.

NEUQUEN (AN).- La cantautora peruana Carmina Cannavino presentará temas de su último disco "Muchacha viento" hoy a las 22 en la Casa de la Cultura, de Roca, y mañana en el Teatro de la Ciudad, Sarmiento 458 de Neuquén, a la misma hora. En ambas presentaciones contará con la compañía del prestigioso pianista Darío Eskenasi, con una amplia trayectoria en el ambiente de jazz latino de Nueva York.

Hace más de dos décadas que Cannavino reside en Ciudad de México, y precisamente ese fue el lugar desde donde comenzó a forjar una carrera que ya la ha llevado a pisar escenarios de todo el mundo.

Ahora se encuentra en el país en gira de promoción y para interpretar los temas de su última producción "Muchacha viento", grabada entre los años 2000 y 2002 en México y Nueva York, bajo la dirección musical del propio Eskenazi, y con la producción artística de Leandro Quiroga.

"Trato de respetar la raíz y el origen de cada una de mis interpretaciones; la palabra tiene la prioridad", señaló la cantautora, en un breve contacto con "Río Negro", a pocas horas de arribar a la ciudad.

En el repertorio de Cannavino pueden encontrarse algunas perlas cuya autoría pertenece al amplio espectro de músicos del folclore latinoamericano. En sus discos, así, pasan canciones de, entre otros, Chabuca Granda, Nicomedes Santa Cruz, Héctor Stamponi, Cátulo Castillo, Milton Nascimento, Jorge Fandermole y Eduardo Falú.

Según comentó, el amor por el folclore latinoamericano "lo heredé de mis padres. Crecí entre valses, marineras, tangos, zambas y chacareras", explicó la cantante, que en 1982 inició su carrera en Lima, Perú, para tres años después instalarse en México, donde grabó tres producciones discográficas que lograron el reconocimiento del público y la prensa especializada.

"Soy compositora pero no de oficio. Me considero más una cantante que una autora de canciones", explicó luego de ser consultada acerca de la decisión de tomar "con mucho cariño" canciones de otros autores y hacerlas propias.

Cannavino se describe como una gran admiradora del tango y del folclore argentino. Pero también del rock, género en el que todavía no incursionó, pero con el que se encuentra ligada generacionalmente. La intérprete peruana dijo que desde pequeña mantuvo contacto con diversos ritmos latinos y aseguró que su padre, un argentino integrante de un sexteto de tango, tuvo una cuota grande de responsabilidad en que esto fuera así.

Carmina compartió escenarios con consagrados de la canción de la talla de Vicente Garrido, Tania Libertad, Alejandro Lerner, Lito Vitale y Juan Carlos Baglietto.

Tanto hoy como mañana, contará con el acompañamiento del prestigioso pianista Darío Eskenazi, con una amplia trayectoria en el ambiente del jazz latino de Nueva York. En esa ciudad, el flautista panameño Mauricio Smith, le abrió a Eskenazi las puertas y poco tiempo después, lo mismo hicieron Mongo Santamarina -célebre por su composición "Afroblue", interpretada alguna vez por John Coltrane- y el saxofonista Paquito D'Rivera.

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