La solidaridad permitió comprar una silla de ruedas

ROCA (AR).- Gracias a la solidaridad de la comunidad, Hugo Fernández, el roquense que se accidentó hace poco más de un año en Paso Córdoba practicando enduro, tendrá la posibilidad de ganar un poco más de autonomía frente a la hemiplejia que le provocó la caída de su moto. En una campaña solidaria organizada por su familia se juntaron los 11 mil pesos que hacían falta para comprar una silla de ruedas especial, indispensable para mejorar su calidad de vida.

"Tuve la idea de hacer una campaña", relata Graciela Morales, su esposa "porque yo sola no podía. No tenía ayuda de ningún lado". "Pusimos una cuenta en el Banco Nación y la gente colaboró muchísimo. Gestioné trámites en todos lados. Hablé con el gobierno provincial porque lo que necesitaba era ayuda. Tanto insistí que en Semana Santa recibí un cheque que me mandó la provincia", agrega, contenta y agradecida.

Hace poco más de un año, Hugo Fernández fue a practicar su deporte preferido, el enduro, a Paso Córdoba. Lamentablemente, en una caída desafortunada se golpeó la cabeza, lesionando la médula espinal. Estuvo internado en el Hospital de Roca durante 3 meses, con respirador y otras complicaciones. Afortunadamente salvó su vida, pero las lesiones en la médula provocaron una parálisis desde los hombros a los pies. Para comenzar con su rehabilitación debieron trasladarlo al Instituo Nacional de Rehabilitación Psicofísica del Sur (INaRePS) en Mar del Plata, donde lucha y trabaja desde hace un año. El mes próximo volverá a Roca con su familia.

Según explicó su esposa, el cuadro de la hemiplejia va a ir teniendo complicaciones, pero continuando con sus ejercicios, se podrían contrarrestar: "La idea es que acá siga la rehabilitación en Adanil". El sábado, la familia enviará la silla a Mar del Plata, para que Hugo aprenda a usarla. Luego, en aproximadamente un mes volverá a Roca y retomará su vida.

"Quiero agradecer a todos los que me ayudaron. Esto tiene que servir para que quien tenga este tipo de problemas no baje los brazos. Hay gente buena y que quiere ayudar" agradece Graciela.