La crisis hizo reverdecer la religiosidad

En los últimos tres años la cantidad de personas en los templos evangélicos, de Testigos de Jehová, Adventista y Mormones, aumentó entre un 20 y 50 por ciento según cada caso. El incremento

Los responsables de los cultos genéricamente llamados "evangélicos" hablan de 50 por ciento más de fieles.

NEUQUEN (AN).- Grandes, medianos y chicos. Para miles, cientos y unos pocos. En el centro, los barrios y las villas. Para sectores altos, medios y bajos. Los templos de iglesias genéricamente llamadas "evangélicas" se expandieron como una enredadera en esta ciudad y a un ritmo constante. La cantidad de fieles que profesan el culto rondan los 35 mil, un número considerablemente superior al de hace apenas un par de años.

"Hay un vacío con el que uno carga y que se llena al formar parte de la iglesia y descubrir a Dios". Así explicaron las personas que fueron consultadas por "Río Negro" su presencia en los templos. Problemas económicos, de enfermedades y familiares, entre otros, son los que mayoritariamente empujaron a los fieles a pisar los templos en busca de una solución o un consuelo.

En rigor, las casi 35 mil personas representan un incremento sostenido que oscila entre el 20 y 50 por ciento según cada caso, en el período que va desde 2000 a la actualidad. Poco más de un centenar de templos en la ciudad son testigos del crecimiento que también se dio en el interior de la provincia (ver aparte).

Los fieles están distribuidos entre las diversas ramas evangélicas (25.000 y un crecimiento del 30%); la iglesia de Jesucristo de los Santos de los Ultimos Días (vulgarmente denominada Mormones, con 5.500 y un 20% más); los Testigos de Jehová (1.500 y 50% más) y la iglesia Adventista (1.300 miembros y 30%).

En todos los casos las estadísticas son aproximadas, en base a la información de cada iglesia y no incluye a las personas que son "amigos" pero que no participan regularmente de sus actividades.

Uno de los motivos que llevan a cada vez más individuos hacia los templos es la crisis socioeconómica. Así surge de las explicaciones dadas por los referentes de cada iglesia y de testimonios recogidos al pie del altar.

"Toda crisis conduce a replantear el camino para encontrar a Dios", aseguró Marcelo Rodríguez, secretario de la Unión de Pastores Evangélicos de Neuquén que agrupa a 60 de las 100 iglesias evangélicas de Neuquén. En términos similares se manifestaron Sergio Molinari, de los Testigos de Jehová, Carlos Ramos de la Adventista, y Freddy Inostroza de la iglesia de Jesucristo de los Santos de los Ultimos Días.

Si bien hay fieles provenientes de todos los sectores sociales, en la mayoría de los casos fueron los sectores medios-bajos los que contribuyeron a engrosar la población en cada una de las iglesias. En general asisten familia completas y pocos van solos.

En todos los casos, las iglesias mantienen su estructura de funcionamiento a través del diezmo -que representa el 10% del ingreso del creyente- o la recepción de donaciones voluntarias. Encuentros, viajes, construcción y mantenimiento de templos, y ayudas de distintos tipos, son algunas de las tareas que se declara se realizan con los fondos.

En el caso de los pastores evangélicos, perciben un salario proporcional a la cantidad de personas que asisten al templo a su cargo. "Todo obrero es digno de un salario", indicó Rodríguez, con una cita del Evangelio.

La iglesia Adventista le abona a sus pastores un sueldo determinado por la sede central de Buenos Aires, indicó Carlos Ramos, referente local de ese culto. Los Testigos de Jehová y "mormones" no perciben salarios: "Cada miembro tiene su trabajo y se dedica a la iglesia ad honórem", dijeron sus voceros.

El mecanismo de elección de los pastores es similar en cada casos: deben cumplir pautas de comportamiento establecidas en las escrituras y estudiar en los ámbitos con los que cada culto cuenta.

Estas iglesias aseguran que no tienen tendencias políticas, aunque evangélicos y adventistas colaboran con el gobierno en materia de ayuda social. Para Jorge Sobisch la cantidad de personas que asisten a los templos no pasó inadvertida, y más de una vez se hizo presente en los distintos encuentros que organizan.

El aumento se repite en el interior

NEUQUEN (AN).- En el interior de la provincia el incremento de personas que asisten a las iglesias evangélicas también fue constante. Actualmente entre los cuatro cultos principales suman alrededor de 28 mil miembros, además de los de esta capital.

El crecimiento, indicaron sus referentes, fue constante al igual que en la capital y en proporciones similares en la mayoría de los casos.

La iglesia evangélica cuenta con unas 15 mil personas en las distintas localidades del interior. Así lo indicó Marcelo Rodríguez, de la Unión de Pastores Evangélicos.

La iglesia de Jesucristo de los Santos de los Ultimos Días tiene 10 mil miembros, en la zona que abarca desde General Roca hasta Bariloche, y que incluye las principales localidades del interior neuquino.

En tanto los Testigos de Jehová, cuentan con 3 mil personas en los diferentes puntos de la provincia, destacó Sergio Molinari. Y la Iglesia Adventista tiene alrededor de 600 miembros.

En todos los casos las cifras no incluyen a aquellas personas que son consideradas "amigos" de la iglesia, pero que no concurren habitualmente a sus templos.

Razones de culto

NEUQUEN (AN).- En el escenario del templo suena una banda que toca rock, pero las letras sólo hablan de Jesús. Las 400 personas que están en lugar -chicos, grandes y ancianos- cantan, acompañan con las palmas y se balancean al ritmo de la música.

Entre ellas está Elida, casada, empleada doméstica, 40 años, tres hijos, católica hasta hace más de un año y del barrio Villa Ceferino. "Son muchas las personas que empezaron a venir por problemas económicos, de salud o familiares", aseguró a "Río Negro". "Está llegando mucha gente nueva, que pensó más de una vez en quitarse la vida y acá desistió de hacerlo".

Ella llegó por un problema de salud de su hija. "Los médicos no supieron solucionarlo pero el pastor nuestro sí", comentó.

Ricardo Pardo, 31 años, casado, dos hijos y vendedor de seguros, nació en una cuna evangélica y hace más de 10 años asiste al mismo templo. "Nosotros somos la iglesia", aseguró. "Aquí encuentro las respuestas que necesito y que vienen de Dios".

Una red de difusión mediática propia

NEUQUEN (AN).- Diarios, revistas y radios. Todas las iglesias llamadas genéricamente "evangélicas" difunden su mensaje también a través de alguno de estos medios, tanto en la capital como en el interior de la provincia.

En el caso de las radios, sólo la iglesia evangélica utiliza este medio. Actualmente tienen cuatro emisoras de FM al aire -reconocidas por la unión de pastores- en diferentes barrios de la ciudad.

Sin embargo desde la sede local del Comité Federal de Radiodifusión (Comfer) informaron que no tienen habilitación para estar al aire. "No concursaron para obtener la licencia", indicaron.

Los funcionarios destacaron que en la zona que abarca la capital y un radio de 30 kilómetros a la redonda, "hay cerca de 20 radios evangélicas sin autorización". Explicaron que "la ley de Radiodifusión establece que la iglesia católica puede tener sus emisoras, pero no dice nada sobre el resto".

La iglesia evangélica también tiene dos periódicos -El Puente y Corriente del Espíritu- que se imprimen en Buenos Aires y son distribuidos en la zona a 25 centavos por ejemplar, indicó Rodríguez.

En tanto los Testigos de Jehová cuentan con dos revistas de tirada quincenal -Despertad y Atalaya-, que también se imprimen en Buenos Aires. "No tiene un costo fijo, se pide una colaboración a voluntad, siempre y cuando se pueda", explicó Sergio Morandi.

Por su parte la iglesia Adventista cuenta con dos espacios en radios AM donde emite programas propios. Contemplaron la posibilidad de tener emisoras propias, según indicó Carlos Ramos, "pero vamos a esperar los llamados a concurso del Comfer para tener todo en regla", destacó.

La iglesia de Jesucristo de los Santos de los Ultimos Días publica de forma mensual la revista "Liahona", que se imprime en Buenos Aires y es gratuita.