Charcos que ya son parte del patrimonio de Cipolletti

Vecinos de las 1.200 viviendas deben convivir desde hace diez años con aguas servidas y estancadas en un sector. Son un riesgo para la gran cantidad de ciclistas que circulan por allí. Dicen que desde el mu

CIPOLLETTI (AC).- Algunos vecinos hasta mencionan con ironía que no sería mala idea proponer que la calle Naciones Unidas entre Scalabrini Ortiz y Homero Manzi, forme parte de los actos del aniversario de la ciudad el 3 de octubre, "porque también se trata de un hecho histórico".

Desde hace unos diez años los vecinos de las 1.200 viviendas de Cipolletti reclaman que el municipio realice obras para evitar la permanencia de aguas servidas y estancadas en ese sector. Pero hasta ahora, a pesar de las reiteradas notas enviadas, no tuvieron respuestas.

"Los charcos de siempre", como los llaman, son un verdadero riesgo para la gran cantidad de ciclistas que circulan por esa zona. "En verano el agua se pudre y es fangosa, y en invierno se congela y es sumamente resbaladiza", dijo una mujer del barrio. Y un comerciante agregó: "en media hora llegué a ver cinco accidentes una vez".

El agua se estanca en mayor cantidad en las esquinas, pero avanza también hacia las calles Scalabrini Ortiz y Homero Manzi de este populoso barrio cipoleño.

La última nota de reclamo la presentaron a principios de marzo al secretario de Obras y Servicios Públicos. Más de 200 firmas acompañaron el petitorio.

"Sobre la calle Naciones Unidas entre las arterias Scalabrini Ortiz y Homero Manzi, existen aguas servidas y estancadas en forma permanente, causando múltiples accidentes a peatones, ciclistas y motociclistas por el piso resbaladizo", escribieron.

"Esto seguramente será de vuestro conocimiento, pero queremos advertir sobre las posibles demandas legales de los accidentados que ocasionará a la comuna un perjuicio patrimonial si no se toman medidas con la finalidad de solucionar esta dificultad. Sería importante verificar de dónde viene o sale esta agua", agregaron además.

Aguas estancadas

Algunas personas consultadas en el barrio hablaron de aguas servidas y otras mencionaron que es el agua que se arroja desde las viviendas (por lavado de autos, veredas, desagote de lavarropas o piletas), que no tiene salida y por eso se estanca. "Tal vez es un poco de las dos cosas", arriesgaron otros.

En la nota que presentaron a principios de marzo aparecen firmas no sólo de los vecinos que están hartos de ver el agua en esos sectores sino también de varios damnificados, es decir, víctimas de accidentes.

Contaron que en una oportunidad una persona mayor se cayó y casi golpea su cabeza contra el cordón de la vereda. En otra ocasión tuvieron que llamar a la ambulancia para asistir a una mujer que se cayó de su bicicleta.

"La gente que se cae no es del barrio", dijeron. La esquina más peligrosa es la de Naciones Unidas y Scalabrini Ortiz, porque es más transitada.

Además del riesgo por los accidentes, otros vecinos plantearon su temor por las enfermedades que pueden ocasionar esas aguas estancadas. "En verano el olor es insopor