Encaran una desratización masiva en Cordón Colón

En el barrio hay un riesgo sanitario potencial por la gran cantidad de roedores. La municipalidad colocará no menos de mil cebos envenenados en distintos sitios críticos. Previamente se realizó una campaña de concientización.

En el barrio viven 10.000 personas cerca de lagunas donde crecen matorrales en los que se refugian los roedores.

NEUQUEN (AN).- La superpoblación de ratas convirtió al asentamiento Cordón Colón en un área de riesgo sanitario potencial y es la razón de la colocación de un mínimo de 1.000 puntos de cebados en los sitios críticos: el borde de los cañadones, zanjones, basurales y la periferia de la vecindad.

Las tareas operativas comienzan el lunes, si bien el programa inició en marzo con una campaña de concientización encarada en conjunto por la comuna, los centros de salud, la vecinal y la red interinstitucional de la barriada.

Es que la información y la motivación que tenga la gente es la clave del éxito del programa intensivo de desratización y saneamiento.

En Cordón Colón viven unas 10.000 personas cerca de lagunas estancadas de efluentes que favorecen el crecimiento de matorrales y que funcionan de refugio de los roedores La suciedad, los microbasurales y la degradación ambiental completan el escenario perfecto para la proliferación de las ratas.

Las ratas roen las paredes, las vigas de madera, las tuberías y los cables, comen el 10% de su peso por día y destruyen 10 veces más de los alimentos que consumen. Además transmiten al hombre una serie de enfermedades, algunas graves.

La colonia de estos roedores crece rápidamente, se mete en las casas y compite por la comida con el hombre. Crían entre 4 a 9 lauchas por vez, después de una gestación de 24 días, entre cinco y seis veces al año. O sea, una rata puede dar a luz a 40 o más lauchitas en un sólo año.

En esta causalidad se entiende la preocupación de las autoridades y la puesta del programa de desratización que durará otros tres meses y que por sus características únicas es la primera que se realiza en la Patagonia.

El plan operativo consiste en la colocación de unos 1.000 puntos de cebado, de ellos, 600 estarán ubicados en el borde de los cañadones, zanjones, basurales y a 100 metros de su periferia El resto será emplazado en los límites de Cordón Colón, en el tramo comprendido entre las calles Colón hasta casi Catriel y de Antártida Argentina hasta la barda.

El área de trabajo va a ser señalizada con afiches y 100 carteles, y además la comuna cojuntamente con un grupo de jóvenes del barrio instalará un stand itinerante por los negocios de la vecindad para informar y evacuar las dudas.

Las tareas de limpieza del lugar entre los dos períodos de control permitirá eliminar la población de otros vectores de enfermedades El subsecretario de Gestión Ambiental, Carlos Roca, lo explica de la siguiente manera: "si el área fuese limpiada antes de desratizar, las ratas huirían hacia las casas complicando la situación sanitaria. Así primero desratizamos, luego eliminamos la basura y las malezas, y luego volvemos a desratizar en los focos".

La importancia de mantener libre de basura al espacio público tiene relación con el hecho de que "las ratas se alimentan de desechos y la mayor disponibilidad de comida favorecen al desarrollo de las colonias".

Los cebaderos plásticos cubiertos son de color negro y "están debidamente identificados con la palabra 'veneno' y la imagen de una rata dentro de un círculo cruzado por una barra Roca advirtió acerca de la toxicidad del veneno e indicó que si bien este sector de la comunidad ha sido entrenado, están previstas las actuaciones de emergencia con las autoridades sanitarias.