El ingenio para salir de Cuba no tiene límites

LA HABANA (AFP) - El intento de un grupo de cubanos para alcanzar las costas estadounidenses en un viejo camión adaptado como inusual embarcación, puso de manifiesto el ingenio de los isleños a la hora de diseñar precarias e insólitas naves que le permitan emigrar En este caso se trató de un Chevrolet modelo 1951, que de sus 52 años de existencia había pasado en la isla 41 años de embargo estadounidense sin piezas de repuesto, sobreviviendo como la mayoría de los miles de vehículos de ese origen y época que aún circulan en Cuba, mediante inventos y adaptaciones caseras "El cubano inventa mucho, la necesidad hace parir hijos machos", dijo un hombre de 60 años al enterarse del caso.

Cuando los oficiales de la guardia costera norteamericana vieron al camión navegando a unos 60Km al sur de Cayo Hueso, el pasado 16 de julio (a unos 100km al norte de Cuba), "no podían creer lo que veían", según dijeron después. La ruptura de relaciones con Estados Unidos, en 1961, dejó en Cuba un parque industrial, automovilístico y de bienes de consumo, condenado a la muerte a corto plazo, por falta de piezas de recambio. Más de cuatro décadas después, miles de esos vehículos aún caminan por las calles, llevando en su interior piezas soviéticas, chinas y rumanas en adaptaciones increíbles, nacidas de la necesidad y la paciencia.

Esa capacidad inventiva se volcó en uno de los principales retos para miles de cubanos: sortear los 150km de mar que los separan de Estados Unidos En los años 70 se hizo famoso en la zona de Morón, 450km al este de La Habana, un campesino que entrenó a su caballo para nadar en el mar. El animal, con dos tanques sellados a manera de flotadores, partió rumbo a las Bahamas, pero tras nadar unos pocos km, el caballo y su jinete fueron descubiertos .

Ingenio y temeridad también se derrocharon durante la Crisis de los Balseros, en 1994, cuando 26.000 personas salieron de Cuba en embarcaciones hechas con láminas de poliuretano, tanques vacíos, neumáticos, cuerdas para amarrar todo, una lona para el sol y remos.