Bush y Blair se defienden de críticas por informes falsos

El presidente estadounidense, George W. Bush y el primer ministro británico Tony Blair se defendieron ayer de las acusaciones de haber exagerado las dudosas informaciones sobre proyectos de Bagdad de comprar uranio para justificar una guerra contra Irak, días antes de una reunión prevista en Texas "Creo que las informaciones de los servicios de inteligencia que recibo son excelentes. Y en éstas se fundan los discursos que doy", dijo el presidente cuando recibió al secretario general de la ONU, Kofi Annan, en la Casa Blanca. "Hoy estoy absolutamente convencido, como lo estaba cuando pronuncié esos discursos, de que (el ex presidente iraquí) Saddam Hussein había desarrollado un programa de armas de destrucción masiva y que nuestro país tomó la decisión correcta" cuando entró en guerra para derrocar al régimen La Casa Blanca admitió el martes pasado que el hecho de haber mencionado el intento de comprar uranio en Africa por parte del régimen de Hussein en el discurso sobre el estado de la Unión del presidente Bush el 28 de enero último había sido un error. Pero, declaró su portavoz, Ari Fleischer, "esa idea, que de alguna manera quiere convertirse ahora en la razón principal de la guerra (...) es una tontería". En un sentido más amplio, la guerra estaba muy justificada por "la amenaza" de Saddam Hussein.

En tanto, el primer ministro británico, Tony Blair, defendió nuevamente la campaña militar angloestadounidense en Irak, e insistió en que su país colaborará en la reconstrucción del país del Golfo como uno estable y próspero. Gran Bretaña "debe estar orgullosa" de su participación en el derrocamiento de Hussein, dijo . "Cuando en los últimos días tomamos los primeros pasos para que el pueblo iraquí tome el control sobre sus propias vidas y las Naciones Unidas hablan de 300.000 personas y fosas comunes, entonces creo que debemos estar orgullosos de que Saddam se ha ido, contentos de que se ha ido", consideró el primer ministro.