Berlusconi debutó con escándalo

El primer ministro italiano provocó ayer su primer incidente como nuevo presidente de la Unión Europea (UE) al proponer a un diputado alemán del Parlamento Europeo el papel de guardián de un campo de concentración nazi. Alemania mostró su enojo. Berlusconi ya había sido cuestionado antes de asumir.

Berlusconi mostró una vez más su falta de tacto, ante las críticas de sus pares europeos.

ESTRASBURGO (Télam-SNI).- El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, asumió ayer la presidencia semestral de la Unión Europea (UE) con un escándalo al calificar de "kapo" nazi a un eurodiputado alemán, hecho que Berlín consideró "inaceptable" "En Italia se está rodando una película sobre campos de concentración nazis. Lo propongo para el papel de kapo (un prisionero a cargo de los otros prisioneros)", espetó Berlusconi al socialdemócrata alemán Martin Schulz.

La respuesta de los parlamentarios no se hizo esperar. En medio de gritos de protesta le exigieron una disculpa y la sala tembló.

Berlusconi, quien se presentó por primera vez como el presidente de la UE en ejercicio, tuvo que interrumpir brevemente su discurso en la cámara europea a poco de empezar cuando varios diputados del grupo de los Verdes mostraron pancartas en las que se leía en francés e italiano: "Todos iguales ante la ley" Los diputados europeos hacían alusión a la inmunidad que recientemente el parlamento de su país le otorgó a Berlusconi y que suspende los procesos judiciales de corrupción en su contra.

En respuesta, y haciendo honor a la torpeza diplomática que lo caracteriza, Berlusconi tachó de nazi a Schulz Entre insistentes aplausos que expresaban el rechazo de la cámara, Schulz estimó "inaceptable" que "un presidente del Consejo Europeo pierda su sangre fría de esta forma", mientras que el presidente del Parlamento Europeo, Pat Cox, lamentó "el tono tomado por el debate" parlamentario porque "daña a Europa".

El jefe de gobierno italiano continuó después de la interrupción, y pidió esfuerzos a sus colegas de los Quince para concluir la negociación del primer tratado de constitución de la UE en diciembre y poder firmarlo en Roma entre el 1 de mayo de 2004, fecha e que entrarán en la UE 10 nuevos miembros, y las elecciones al Parlamento Europeo de junio del próximo año.

Además de presentar como prioridad la lucha contra la inmigración ilegal y el relanzamiento de la economía europea, Berlusconi llamó a reforzar las relaciones de la UE con Estados Unidos para que Europa sea un actor internacional pleno.

Por su parte, el gobierno alemán juzgó "inaceptables" las declaraciones de Berlusconi sobre Schulz y manifestó su descontento por este tema al embajador de Italia en Berlín, Silvio Fagiolo, indicó un portavoz de la cancillería alemana Las críticas al premier italiano surgieron incluso en el seno de su gobierno, cuyo número dos, Gianfranco Fini, dijo que "Berlusconi fue gravemente provocado por el honorable Shulz. Desgraciadamente cayó en la trampa Ninguna acusación, aunque sea excesiva, puede justificar el epíteto de "kapo" nazi para un adversario político. Hubiera sido mejor excusarse", dijo.

Al calor del debate parlamentario, varios diputados europeos expresaron su preocupación por el mandato de Berlusconi y criticaron el programa de trabajo italiano en la UE, a lo cual el Cavalliere respondió alegando: "En mi historia sólo hay éxitos".

"Cuando oímos hablar a Berlusconi de Europa nos preocupa un poco", declaró el presidente el grupo socialista, Enrique Barón, que recordó al dirigente europeo su "obligación de legislar para todo el mundo y no sólo para sus propios intereses" Su homóloga del grupo de los Verdes, Monica Frassoni, denunció la "concentración de poderes económicos y mediáticos" de Berlusconi en Italia y abogó por el "pluralismo en los medios de comunicación en la UE", ante lo cual éste respondió que los periodistas en su país son independientes.