Un preso aprovechó un descuido y se escapó por la "puerta grande"

Fue en la alcaidía de Roca y hasta anoche no había sido recapturado. Salió junto con las visitas de los otros internos

ROCA (AR).- Un joven que se encontraba detenido en la alcaidía de Roca desde hace poco tiempo, aprovechó que los guardias no lo conocían de "vista", y abandonó la cárcel aprovechando el horario en que se retiraban los visitantes de los internos.

El prófugo fue identificado como Luis Ernesto Aveldaño González, de 19 años, quien se encuentra procesado por delitos contra la propiedad ocurridos en la zona de Choele Choel.

El joven escapó sin levantar sospechas, y se cree que la maniobra estuvo muy bien planificada. Es que Aveldaño González aprovechó su gran parecido físico con una persona que estaba de visita, por lo que llegó hasta la guardia, pidió el documento de su "gemelo", y tras mirar la foto, el uniformado se lo habría entregado. Así, y con tranquilidad, llegó hasta la puerta de hierro de la alcaidía y logró ganar la calle.

Después de un tiempo prudencial, el verdadero dueño del documento llegó a la guardia, y por más que buscaron, el DNI no apareció. Fue en ese momento cuando se cayó en la cuenta de que alguien ya lo había retirado. Pero al ser un preso "nuevo", tampoco se tenía la certeza sobre a quién buscar. Ya eran las 19 del jueves, cuando se ordenó un recuento de internos.

Pero la superpoblación carcelaria también jugó a favor del prófugo, ya que hasta que se pudo reunir a los presos en cada pabellón, se hicieron las dos de la madrugada de ayer.

Recién ahí se supo que el prófugo era Aveldaño González, por lo que se irradió en forma urgente la novedad a las distintas unidades policiales del Alto Valle y los puestos camineros, además de alertar a la policía de Valle Medio. Los uniformados no descartaban que el prófugo hubiera alcanzado a llegar a su zona de origen, por lo que en el Valle Medio también se intensificaron los controles. Aveldaño González estaba alojado en el pabellón cuatro.

Esta misma semana, y durante un control de rutina, los guardias de la alcaidía roquense descubrieron un túnel de unos diez metros de longitud, aunque no habían alcanzado a llegar del otro lado del muro.

Hasta ayer, la cárcel roquense alojaba a 444 internos, cuando su capacidad es para 180.