Daños, amenazas y tiros en el barrio Virgen Misionera

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Un gigantesco disturbio volvió a alterar la tranquilidad de los vecinos del barrio Virgen Misionera, en el kilómetro 7,200 de la avenida Los Pioneros, cuando los ocupantes de un patrullero fueron atacados por una patota cuando concurrían a verificar un presunto tiroteo.

Como consecuencia del procedimiento la policía inició una causa por daño calificado y resistencia a la autoridad, y otra por el abuso de armas, que varios denunciantes le adjudicaron a un vecino del barrio.

Los hechos comenzaron a desencadenarse a las 22.30 del domingo, luego que varios llamados telefónicos alertaran a las autoridades de la comisaría de Melipal sobre la producción de disparos de armas de fuego. Varios uniformados acudieron a verificar la denuncia a bordo de un patrullero Renault 19, pero a poco de ingresar al barrio, en Ai-mé Painé y Tejada Gómez, fue-ron recibidos a pedradas por un grupo de patoteros, que destrozaron las unidades ópticas y otros accesorios del vehículo.

Los agentes efectuaron varios disparos al aire para dispersar a los malvivientes, y después trataron de detener a algunos para responsabilizarlos por los daños, pero sólo pudieron apresar a Sergio Parra, de 20 años, quien habría estado alcoholizado, y ahora está acusado de haber resistido el procedimiento.

La dispersión de los revoltosos y la detención de Parra, sin embargo, no devolvieron la tranquilidad al barrio, porque siguie-ron sonando los disparos. Por es-tos hechos fue acusado por varios vecinos Santiago Calabrese, titular de la empresa de autogestión y taller de carpintería FAT, pero los agentes sólo lo notificaron de las denuncias, porque el juez de turno no ordenó su detención.

Calabrese es quien hace dos semanas protagonizó un piquete sobre la avenida Los Pioneros, para reclamar mayor seguridad y la presencia de jinetes de la policía para patrullar las laderas del cerro Otto. Su protesta estaba fundamentada en la reciente sustracción de un equino de su propiedad, que como sucede muy a menudo pasó a enriquecer la dieta de los cuatreros urbanos.