Miércoles 2 de julio de 2003

Hallan cadáver enterrado en el patio de una casa

Fue en Cipolletti y la víctima es un changarín de entre 30 y 40 años. Tres personas sospechosas fueron detenidas ayer por la policía. Habría sido apuñalada y encontraron un cuchillo.

 

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Los efectivos policiales trabajaron hasta bien entrada la noche en la vivienda donde encontraron el cadáver de Isaac Castillo.

CIPOLLETTI (AC).- La policía encontró ayer el cadáver de un hombre en el patio de una humilde vivienda del barrio Villarino de Cipolletti, en el norte de la ciudad. El cuerpo de la víctima, que se presume que es una persona que había desaparecido unos días antes, presentaba heridas de arma blanca.

La policía apresó a tres personas por sus posibles relaciones con el homicidio, que están a disposición de la jueza Margarita Carrasco.

La sospecha, en un primer momento, de que la víctima pudiera ser Sergio Avalos preocupó a la Policía y a la Justicia, que rápidamente pudieron despejar sus dudas por el testimonio de una persona que reconoció que, a simple vista, se trataba de su hermano, Isaac Castillo, un hombre de ente 30 y 40 años, quien padecería problemas de alcoholismo, según fuentes judiciales.

La casa donde apareció el cadáver está ubicada en Don Bosco y Scalabrini Ortiz, casi en el límite norte de la ciudad.

Los fondos de las viviendas que se extienden como en una tira, dan a un descampado.

Según informaron voceros de la Justicia, Marcos Castillo, el hermano de Isaac, denunció la desaparición de su hermano el lunes pasado.

La víctima, según contaron algunos vecinos, vivía en La Esmeralda y Falucho, a pocas cuadras del lugar donde estaba enterrad su cuerpo sin vida.

Se supo que no tenía ocupación fija y solía presentar problemas de conducta. De hecho, tenía antecedentes judiciales.

El hallazgo del cuerpo, que corrió por cuenta de los efectivos de la comisaría 24, se produjo ayer pasadas las dos de la tarde. Lo que a la policía le llamó la atención fue la presencia en la superficie de cierto tipo de mosca y los olores que dominaban el sector.

En la vivienda en cuyo patio fue enterrado el cuerpo vive una persona de apellido Quijada, confirmaron vecinos y fuentes de la Justicia.

La policía cercó la zona del hallazgo con cintas, en torno a las cuales todo el barrio se reunió a mirar el procedimiento, aunque con poco éxito porque el sitio d donde desenterraron el cadáver fue resguardado de miradas y de flashes y cámaras de televisión con improvisados telones hechos de rezagos de lonas encontrados en el sector.

Junto al cuerpo, encontraron un cuchillo de mediano tamaño y prendas de vestir aparentemente manchadas con sangre.

"Un perro muerto"

Según los vecinos que vieron el procedimiento, el dueño de casa argumentó en un primer momento que el olor nauseabundo obedecía a que en el lugar estaba enterrado un perro muerto.

El portavoz judicial que le dio la información a "Río Negro" no pudo precisar el tiempo que llevaba el cadáver allí, lo que será determinado por la autopsia, pero confió que el estado del cuerpo revela que el crimen se cometió en los últimos días. Especialmente si se tiene en cuenta que la desaparición se denunció el lunes.

Cuando la noche comenzaba a caer y el frío se hacía sentir, llegó al lugar la jueza Carrasco, quien supervisó las tareas de la policía y los bomberos junto con la fiscal Alejandra Berenguer, quien estuvo desde que se inició el operativo.

Hay testigos que dicen haber visto a Castillo más de una vez, en compañía de otra persona, en la vivienda en cuyos fondos apareció el cadáver.

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