En junio el precio mayorista de la luz hizo historia

El gobierno nacional intentó por todos los medios que el valor de la electricidad no subiera en el invierno, pero la falta de gas para las centrales térmicas obligó a generar

CIPOLLETTI (AC) - A pesar de los esfuerzos del gobierno nacional por contener el precio mayorista de la luz y evitar así el traslado a las facturas minoristas, en junio los valores promedio de generación de la energía fueron los más altos de la última década.

El mes pasado el precio promedio mayorista (monómico) de la electricidad fue de 50,26 pesos el MWh, un 132% más que hace poco más de un año.

Hasta abril de 2002 el precio que los generadores les cobran a los distribuidores (como Edersa, CEB o EPEN) y éstos le trasladan a sus clientes se mantenía en baja: 21 pesos por cada MWh.

Pero, aprovechando los acomodamientos de rutina de tipo estacional, los productores de electricidad le arrancaron al gobierno de Eduardo Duhalde un aumento de hasta el 50%. Eso fue en mayo de 2002.

Pero además, durante los meses siguientes se les dio a los generadores el dinero de un fondo compensador de precios que se alimenta de las diferencias entre lo que la administradora del sistema, Cammesa, les cobra a los minoristas y les paga a los productores. Ese fondo prácticamente desapareció.

En la misma época del año, pero en 2003, la nueva administración de Néstor Kirchner le dio al sector eléctrico mayorista un crédito de 150.000.000 de pesos para evitar que, con la fluctuación estacional, los precios volvieran a subir. Como resultado, no hubo reajustes.

Pero la escasez de gas, originada falta de inversiones de las empresas transportistas, hizo que fuera necesario producir electricidad con combustibles mucho más caros, como el fueloil, porque la hidrogeneración, con las restricciones de caudales y de transporte, no da abasto para cubrir la demanda.

No es el único inconveniente que la falta de gas le trasladó al sector eléctrico: en el sur de Río Negro y Neuquén las ciudades que no están interconectadas a la red tuvieron que ser atendidas con centrales a fueloil (un combustible carísimo) porque el gasoducto Cordillerano no da abasto para cubrir la demanda.

La última vez que el precio del MWh había superado la barrera de los 45 pesos fue en enero de 1993, en pleno inicio de proceso de privatización y regulación del mercado eléctrico argentino. Ese mes el valor de esa unidad de medida fue de 47,66, de acuerdo con la información que maneja Cammesa (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA).

En el otro extremo de la lista aparece el precio que tuvo el MWh en noviembre de 2000. Fue de 20,78 pesos, un 60% menos que en junio pasado.

Los generadores, lejos de entusiasmarse con este dato, sostienen que, expresados en dólares, los precios de la luz están en su punto más bajo de los últimos diez años, producto de la devaluación de la moneda argentina.

De hecho, los 50,26 pesos que costó el MWh de electricidad el mes pasado significan 18 dólares, que medidos con los 20,78 pesos convertibles de noviembre de 2000, representan una rebaja de casi el 11%.

Los generadores miden en dólares los precios no sólo por el costo de sus insumos, afectado por la devaluación y la inflación, sino principalmente porque la mayoría tiene créditos bancarios en esa moneda.