Cartellone dice que Chihuido I no está descartada

El presupuesto global de la obra rondaría los 750 millones de pesos.

El Estado neuquino debería responder por el 50% de la financiación.

La comisión de energía de la legislatura neuquina, donde fue analizada la viabilidad de la obra de Chihuido I.

CUTRAL CO (ACC/AN).- La posibilidad de llevar adelante la propuesta de Chihuido I no está descartada por parte de la firma Cartellone siempre y cuando la provincia demuestre interés en que se realice. Ese "interés", como en el caso de su hermana menor, Chihuido II, es, para la empresa, un aporte financiero estatal.

Para esta represa, que se ubicaría en la confluencia del Neuquén con el Agrio y controlaría "de manera definitiva" los caudales máximos de la cuenca, la inversión rondaría hoy los 750 millones de pesos, y de ese importe, el Estado provincial tendría que encargarse de financiar la mitad.

José Cartellone Construcciones Civiles, una empresa mendocina que compite en este proyecto con el que impulsa su comprovinciana Industrias Metalúrgicas Pescarmona, presentó ofertas para hacer la obra pero quedó descartada cuando el gobierno provincial priorizó a Chihuido II, en función de su menor costo y el aprovechamiento "multipropósito". Poco tiempo después, los mismos empresarios volvieron a insistir como una obra de iniciativa privada pero no obtuvieron respuestas en los despachos oficiales de la provincia.

Pero al embanderarse definitivamente el gobierno de Jorge Sobisch en Chihuido II, diputados provinciales que representan a Cutral Co y Plaza Huincul en la Legislatura -algunos integran la comisión de Energía- se comunicaron con directivos de Cartellone para consultar si mantenían interés en el proyecto.

La respuesta fue afirmativa, pero "lo único que pedimos es que nos respondan la presentación que ya hicimos", comentó un alto ejecutivo de la firma, en diálogo telefónico con "Río Negro" En esa propuesta elevada al gobierno provincial se incluyó un anteproyecto de las obras, un estudio de impacto ambiental, del aprovechamiento agroindustrial, de tarifas de energía. "Es un trabajo muy complejo que debe tener más de 1.500 páginas y no vemos razonable seguir invirtiendo esfuerzos en ingeniería si no existe de parte de la provincia un interés manifiesto en la obra", agregó. Antes del derrumbe de la convertibilidad en el país, el presupuesto de Chihuido I rondaba los 360 millones de dólares. Luego los empresarios debieron hacer una reevaluación y así se determinó que hoy la propuesta rondaría los 750 millones de pesos. Chihuido I demandaría 129 millones de dólares al Estado neuquino, otros 107 millones a la Nación y el resto -hasta llegar a 370 millones- lo aportaría Pescarmona.

En cuanto a la forma de financiación de Chihuido I, el vocero de Cartellone expresó que de manera preliminar podría establecerse que una porción la aportaría "el concesionario si es que la figura es la concesión contra la generación de energía eléctrica, mientras que las provincia a través de subsidio respondería por alrededor del cincuenta por ciento". Cartellone defiende la iniciativa por considerar que se trata de la mejor alternativa para solucionar una serie de problemas. Respaldan la conveniencia de la propuesta a la que definen como multipropósito porque no sólo permitirá la generación de energía eléctrica, si no que actuará en el control de crecidas, posibilitará la entrega de agua a una amplia región, entre otras ventajas.

El origen, en Agua y Energía Eléctrica

CUTRAL CO (ACC/AN).- Los estudios básicos para Chihuido I figuran en un proyecto que la estatal Agua y Energía Eléctrica elaboró en la década de 1970, y sobre ese fundamento se diseñó como dique compensador Chihuido II. El emplazamiento diseñado para el primero coincide con el que proyecta Cartellone, por lo cual en breve se podrían desarrollar las tareas de ingeniería para establecer la propuesta definitiva.

Sin esos estudios, que "son muy completos, no se podría iniciar una obra de esta magnitud. Chihuido I está en la misma ubicación que determinó Agua y Energía hace tiempo", manifestó a este diario el vocero de la firma José Cartellone Construcciones Civiles.

Si la Nación y la provincia están de acuerdo y se llega a un consenso en la cuestión financiera, "en unos pocos meses -de 3 a 6 - estaríamos en condiciones de ejecutar las obras definitivas porque la ingeniería que resta se puede desarrollar rápidamente debido a que contamos con toda la información básica", agregó En Cutral Co uno de los principales defensores y referentes de que se concrete Chihuido I es Miguel Riedberger, un vecino que tuvo una activa participación en la primera manifestación popular de Cutral Co, la pueblada de junio de 1996. Riedberger es el encargado de acercar la documentación sobre esta propuesta a las distintos estamentos oficiales, como los diputados provinciales. Esta iniciativa contempla la construcción del canal Lolol Co, que permitiría llevar agua a la comarca petrolera "por gravedad". Es de mayor capacidad instalada que Chihuido II, con una generación media anual de energía de 1.700 gigavatios año contra los 1.050 de Chihuido I, y además contempla la creación de 2.000 puestos de trabajo de manera directa.