El campeón que agotó su grandeza

La mayoría de los que ganaron la Intercontinental no tuvo éxito afuera. Palermo y Román, casos testigos.

Una postal: Palermo elegido jugador de la final. Hoy busca club.

¿Qué es lo que diferencia a un gran equipo de otro plagado de estrellas?

La pregunta se suelta por lo siguiente: ayer se dio a conocer que el Villarreal, equipo de mitad de tabla de España, le dio a entender a Martín Palermo, continuándole las vacaciones mientras el equipo vuelve a las prácticas, que no lo tiene en cuenta para esta temporada. Palermo había sido vendido, hace menos de tres temporadas, por Boca en algo más de 10 millones de billetes verdes. El delantero platinado, se recuerda, fue el héroe de la final de la Intercontinental ganada por Boca ante el Real Madrid, en la que anotó los dos goles de su equipo De aquel equipo, que había salido campeón invicto en la Argentina, Walter Samuel fue vendido a la Roma en 20 millones de dólares. Un pase colosal. Hoy, Samuel continúa en la ciudad eterna y es uno de los mejores zagueros del planeta.

Ahora bien, ¿Qué ocurrió con el resto, con el vuelo internacional de esos campeones? ¿Qué pasó con la promesa de romper redes en el calcio italiano de Palermo, hoy desechado en el Villarreal? ¿Y con las pisadas sin patria de Riquelme, hoy sin lugar en el Barça? ¿Dónde están Ibarra, Cagna, Bermúdez, Serna, todos ellos campeones aunque con un recorrido silencioso por las ligas del mundo?

Del equipo que derrotó al Madrid, sólo Oscar Córdoba y Aníbal Matellán se asentaron en Europa. Y no en grandes equipos. El defensor juega en el Schalke 04 alemán. El arquero está a préstamo en el Besiktas de Turquía. Como se observa, una liga que recién este año -la alemana- se la puede considerar de cierta elite; y otra de innegable tercer orden (la turca).

Mientras Serna acaba de firmar para Chacarita, Cagna e Ibarra volvieron a Boca. Bermúdez se refugió en Newell's y Traverso fatiga la defensa del Querétaro de México. Y la lista sigue. Basualdo y Pandolfi fueron sabios: se retiraron.

El caso de Riquelme es, quizá, el más emblemático: hace solo un año era considerado uno de los grandes cracks universales. Mucho juraban que su estrella también brillaría en el mejor fútbol del mundo. Todos salvo un periodista, Santiago Segurola del diario El País de Madrid, quien aseguró que la adaptación del volante sería muy dificultosa y que su fútbol, transversal y transportador, no encajaría allí. Cuando Segurola lanzó su estocada de tinta, decenas de periodista saltaron como resortes para defender "el buen nombre del fútbol argentino". Es probable que Riquelme ratifique nomás su condición de crack. Pero como señaló Marcelo Bielsa, su período de adaptación, su paso por la aduana europea, dilatará su explosión. Una reflexión final: sin duda aquel campeón tenía un ingeniero descomunal: Carlos Bianchi. (AR)

"Por Riquelme hay muchas ofertas"

El presidente del Barcelona, Joan Laporta, dijo ayer que hay varias ofertas por el pase Juan Román Riquelme, quien recientemente fue considerado "transferible" por el club español tras la llegada del brasileño Ronaldinho Por Riquelme hay muchos clubes interesados. Nuestro interés está en cederlo una temporada a algún club, ya sea español, francés o italiano", aseguró el máximo dirigente del Barcelona "Riquelme es un excelente jugador. Confiamos en él y además le hacemos un reconocimiento público por la actitud que ha mantenido a raíz de esta situación. Estamos abiertos a las propuestas que nos están haciendo siempre que sean beneficiosas para el Barça y sobre todo para el jugador, que se lo merece", señaló Laporta El titular del club catalán no quiso entrar en el análisis de las propuestas recibidas para la cesión de Riquelme y se mostró enigmático al ser consultado sobre la posibilidad de que el futbolista pase al Atlético de Madrid, tal como se rumorea, o al fútbol mexicano.