Cargó las pilas y volvió al trabajo

VIEDMA (AV).- Sólo fueron dos días, pero a Miguel Correa le sirvieron para recuperar "energías afectivas" previo a su primera participación en los Juegos Panamericanos.

El palista local cumplió una gran actuación en la última fecha de la Copa del Mundo de canoaje que se desarrolló en Croacia y tras regresar al país viajó a esta ciudad para encontrarse con los suyos.

Sobre su reciente actuación, que significó la primera medalla en una Regata Internacional de mayores (K-2 200 metros), y sus dos primeras finales (200 y 500), indicó que "cumplimos el objetivo que teníamos cuando llegamos a Europa. En Polonia y en Hungría estuvimos cerca, pero en Croacia pudimos lograrlo y es más importante lo de 500 metros porque es una distancia olímpica".

Con timidez mostró su medalla de bronce y contó que "para las primeras regatas seguimos con el plan de entrenamiento y recién en Croacia hicimos una pequeña puesta a punto".

Adelantó que la próxima semana "nos vamos a México para realizar la adaptación al calor fuerte y después viajamos a Santo Domingo".

En República Dominicana competirá en el bote doble de 500 metros junto a Fernando Redondo y en el K-4 1.000 con Redondo, Damián Dossena y Rodrigo Kaffa, al tiempo que confirmó la presencia de su hermano Javier, con los botes individuales.

Tras la competencia Panamericana todo el equipo viajará a Atlanta para afrontar el Campeonato del Mundo clasificatorio para los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.

"El objetivo es quedar entre los ocho primeros en K-1 y entre los seis primeros en K-2. Va a ser muy difícil, es posible que Javier lo logre", afirmó.