El título que tanto esperó Zabaleta

Después de 5 años sin títulos , en Suecia consiguió su segundo torneo de la ATP.

Su primer y único título en el circuito ATP había sido en 1998. Después sólo alcanzó cuatro finales (tres en 1999 y una este año). Además, nunca un argentino había ganado el torneo de Bastad (Meligeni, nacionalizado brasileño, lo hizo en 1995), que se juega ininterrumpidamente desde 1948 y donde entre otros ganaron jugadores de la talla de Mats Wilander, Björn Borg, Illie Nastase y Carlos Moyá La historia personal y en el torneo no favorecían a Mariano Zabaleta, pero en el polvo de ladrillo de Suecia sacó a relucir su mejor juego, aquel que lo llevó a meterse en la elite del tenis mundial, y se alzó con su segundo título profesional.

En la final, el tandilense, 41 en el ranking, se enfrentó a un viejo conocido: Nicolás Lapentti En los cinco enfrentamientos previos, el argentino se había impuesto en cuatro oportunidades, todas sobre polvo de ladrillo. La única victoria del ecuatoriano fue en 1999, sobre carpeta, por la Zona Americana de la Davis. En Bastad, la victoria volvió a ser para Zabaleta, quien se impuso en 1 hora 40 minutos, por 6-3 y 6-4.

Así Mariano logró su segundo trofeo para acompañar al obtenido en Bogotá, en febrero del 98. Luego de ese año perdió las finales de Ham

burgo, Sankt Poelten, Amsterdam (en 1999) y Acapulco (2003). "Demasiado tiempo esperando, ¿no?. Ese es uno de los motivos por el cual siento una felicidad enorme", reconoció luego de la final de ayer Zabaleta completó así una gran semana, ya que el sábado había conseguido el mejor triunfo de su carrera al vencer por 2-6, 6-3 y 6-4 al español Carlos Moyá, defensor del título y número cuatro del mundo.

Con su victoria ante Lapentti, 76 del ranking mundial, Zabaleta, se ubicará entre los 35 mejores del mundo.

En su camino a la final, Zabaleta venció sucesivamente al chileno Nicolás Massú (72), al sueco Björn Rehnquist (158) y al ruso Mikhail Youzhny (30) Al igual que en la semifinal, Zabaleta jugó ayer con mucha agresividad desde el fondo de la cancha, y aunque no sacó muy bien, pudo controlar en todo momento al talentoso ecuatoriano.

El argentino, quien desde que es entrenado por Alejandro Gattiker mostró grandes progresos en su juego -sobre todo en el aspecto anímico-, fue finalista este año en el abierto mexicano, donde perdió la definición ante Agustín Calleri Un quiebre sobre el servicio de Lapentti para 3-1 en el primer set le permitió al argentino tomar ventaja desde el principio y llevarse el parcial con relativa comodidad En el segundo set, tras salvar dos break points sacando 3-3 y 15-40, Lapentti, que debió ser atendido por problemas en su pierna izquierda, perdió su saque para quedar 4-5 Zabaleta ganó a continuación su servicio con autoridad y se llevó el título. "Entre aquel torneo ganado en Bogotá había perdido cuatro finales, por eso estoy tan feliz hoy, espero que sea el comienzo de una nueva época", se entusiasmó el campeón.