Quilmes terminó con el maleficio en el momento menos pensado

Se acabó la mufa. Los fantasmas no aparecieron por Caballito y Quilmes es de primera.

Después de cinco finales perdidas, pintaba para temporada de transición. No fue así y en el momento menos pensado, con un plantel inferior a los anteriores, Quilmes llegó a la primera división del fútbol argentino.

Tal vez fue una táctica de la dirigencia y en ese caso, les salió perfecto. Apostaron al perfil bajo, confiaron en un DT de la casa como Gustavo Alfaro y cumplieron con el objetivo. Ayer, el "cervecero" neutralizó a Argentinos Juniors, aguantó el 0-0 en la cancha de Ferro y como había ganado 1-0 en la ida, con gol de Agustín Alayes, se aseguró el pase a la elite Quilmes se olvidó de las cinco finales perdidas en 2000 y 2001 y, acompañado por una multitud que desbordó la tribuna visitante del estadio de Caballito al punto de que muchos debieron ser reacomodados en una de las plateas, cumplió la meta.

Además, transformó a Alfaro en un especialista, porque hace un año subió con Olimpo Argentinos, que ahora tendrá una chance extra de ascenso, pero aún más problemática ante Nueva Chicago, dispuso en el arranque una formación ofensiva, pero no pudo gravitar demasiado Quilmes se plantó cautelosamente, lo más lejos posible de su arco y volvió a sorprender en la batalla estratégica, con la ubicación del "Cachorro" Abaurre casi como extremo derecho y otra vez complicó con el enganche Darío Fernández.

El partido, que se planteaba de ida y vuelta, pero sin llegadas demasiado claras, se hizo más y más trabado En el segundo tiempo, las apariciones delante de los arcos fueron cada vez más espaciadas. Después de los 30, Quilmes pareció aferrado a resistir, amparado en el gol del juego de ida y temeroso de que un acierto final de Argentinos lo obligara a incursionar en un tiempo suplementario a gol de oro, que hubiera revivido los fantasmas del pasado. Nada de esto pasó y se desató el delirio "cervecero".