Jueves 3 de julio de 2003

Dos hermanas contra el mundo

Las Williams juegan las semifinales con las belgas en Londres.

Las hermanas Williams intentarán hoy en las semifinales de Wimbledon reconquistar la hegemonía perdida en Roland Garros a manos de las belgas Kim Clijsters y Justine Henin-Hardenne "La próxima vez jugaré me-jor", apuntó Serena con lágrimas en los ojos después de perder la semifinal en París frente a la pequeña Henin-Hardenne, quien luego conquistó el título La oportunidad llegó y ambas jugadoras volverán a enfrentarse por un puesto en una final de Grand Slam. En París, la estadounidense no esperó a su rival en la red y la saludó fríamente de camino a su silla.

Sin embargo, Henin-Hardenne aseguró que no hay ningún resentimiento entre ambas "Somos profesionales, colegas. Hace poco estuve hablando con ella en el vestuario. Vamos a coincidir bastantes veces durante nuestra carrera, así que es mejor que sea así", apuntó En Roland Garros, Venus Williams se quedó en octavos de final, pero tres semanas después parece haber recuperado su mejor nivel, el que le llevó hasta la final del Abierto de Australia "Me gustaría ganar otro título de Grand Slam y creo que éste es el lugar para hacerlo", comentó la mayor de las hermanas. Para cumplir con su objetivo tendrá que derrotar en semifinales a Clijsters, quien está ansiosa por lograr su primer título de Grand Slam después de perder la final en París A principios de año, las Williams jugaron en Australia su quinta final de Grand Slam entre ellas justo después de eliminar en semifinales a las dos jugadoras belgas En aquella ocasión, Venus se encargó de Henin-Hardenne y Serena de Clijsters. La historia vuelve a repetirse invertida en Wimbledon, donde la rivalidad entre las Williams y las belgas es algo real. (AR y Télam).

Quien siembra vientos...

Un año jugando finales del Grand Slam, acumulando títulos y sólo reciben silbidos. "Esa es la historia de mi vida", expresó Serena Williams en Roland Garros después de perder con la belga Justine Henin.

Su vida y la de su hermana Venus la diseñó su padre Richard. Después la modelaron ellas.

"Recogen lo que siembran", expresó el argentino Carlos Rodríguez, el entrenador de Henin, en declaraciones al diario "El País".

Serena y Venus parecen dispuestas a seguir sumando éxitos. Pero sus triunfos no pueden evitar que un sector importante de los aficionados sienta adversión hacia las dos.

"Si los aficionados franceses, muy educaron, terminaron silbando a Serena es porque algo no funciona", explicó Rodríguez.

Agregó que "cuando Justine superó a Serena este año en Charleston, en su propio país, decenas de aficionados nos felicitaron. Nadie en Bélgica le habría dado su apoyo a la Williams si le ganaba a Henin".

Rodríguez apuntó que "hay algo que no gusta de las Williams y no tiene nada que ver con el racismo".

También comentó que "en otro torneo Serena y Venus pasaron junto a Henin, le dieron un golpe con una bolsa. Lejos de disculparse, se rieron de ella metros más adelante. No tienen respeto por sus rivales."

Las Williams formaron un círculo cerrado y acusaron a sus rivales de racistas. Richar no ayudó cuando señaló que "sólo Serena puede evitar que Venus sea la número uno", o apuntó que "Venus, por su calidad, debería jugar contra los hombres".

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