De la Puente, el hombre orquesta

No se muere por el rating y ahora presenta "Aventura National Geographic"

De la Puente se reparte entre la tevé, la radio, la música y los cuentos.

BUENOS AIRES, (Télam).- El conductor Eduardo de la Puente atraviesa una etapa de intensa actividad en diversos campos, pues a sus 11 años junto a Mario Pergolini en "Cuál es?" por la Rock & Pop y en "Caiga quien caiga" por Canal 13, suma la conducción de "Aventura National Geographic" por el mismo canal, la ejecución de la guitarra en una banda de rock y la edición de "Por qué tardé tanto en casarme", libro de cuentos de su autoría Con "Caiga quien caiga" ("CQC"), el irónico resumen de noticias que transformó códigos en la tevé argentina, De la Puente, Pergolini y Juan Di Natale llevan siete temporadas en el aire. En marzo pasado, el producto de Cuatro Cabezas comandado por el trío vestido de negro regresó por segundo año consecutivo al 13 y marcó 20,7 puntos de rating, tras haberse despedido a lo grande -en 1999- de América, donde había completado cinco temporadas exitosas, en las que se ganaron la fidelidad de un público mayormente joven y el rechazo de no pocos políticos En su vida en la pantalla chica, el conductor, a punto ahora de cumplir casi 40 años, se puso al frente de distintos ciclos: en 1997, por ejemplo, incursionó en el cable con "El acomodador", programa dedicado al cine nacional que emitía Volver. En 2000 piloteó "Volverte a ver", también por Volver, un ciclo producido por Miguel Rodríguez Arias que repasaba los 50 años de vida de la tevé local, comparando el pasado y el presente del medio Además, ese mismo año debutó en Canal 13 con "Codicia", envío diario de entretenimientos producido por Promofilm, donde los participantes podían ganar hasta 500 mil pesos si respondían correctamente nueve preguntas Hoy demuestra su versatilidad al animar la segunda temporada de "Aventura National Geographic", ciclo de documentales destacados por un gran trabajo de producción y edición, que conduce desde hace un mes los domingos a las 19 por el 13 - ¿Qué es la conducción para usted?

- Fundamentalmente es parte de un laburo. Aprovecho cierta versatilidad, y a partir de eso exploro, haciendo cosas que no son las que más fácil me salen, como "CQC" o "Cuál es?". Lo de "Aventura National Geographic" me permite ver cuáles son mis límites: esa es una de las cuestiones por las que acepté el proyecto. Como otros tantos campos que manejo en mi vida, la conducción me permite explorar y divertirme - ¿El conductor es quien es realmente, es un personaje, o es un poco y un poco?

- Haciendo lo de "National..." hay muchas cosas de mi personaje o de lo que soy que las guardo, porque serían desubicadas. Hay material que me da para hacer chistes muchos más zarpados y más 'border' que los que hago, así que sin dejar de ser quien soy, cuido ciertas formas. En definitiva ese también es el desafío: jugar con ciertas reglas y pasarla bien, sin traicionarse ni dejar de ser lo que sos - ¿Cómo se prepara para conducir ciclos tan distintos en tevé?

- En "CQC", por una cuestión de contexto y compañía, estoy mucho más relajado. Leemos antes qué notas van pero en realidad vamos sin red, lo que es parte del encanto del ciclo. En "Aventura..." estoy solo y además es muy específico. Veo el material, leo los guiones que me escribe la producción, una especie de idea general muy puntual, ya que laburan con un rigor científico que es verdaderamente estricto. A partir de ahí, queda un poco a mi criterio. Creo que por eso me llamaron: no tengo un discurso académico, sino que puedo decir las mismas cosas pero más accesibles y divertidas o menos estructuradas - ¿Solía mirar ciclos de tipo documental como "Aventura..."?

- No soy bicho de documental, pero si hago zapping, paso por un documental y cometo el error de quedarme mirándolo más de 15 segundos, sea de lo que fuere, fui: lo veo hasta el final. Con los documentales por un lado hay una forma de hacer interesante lo que podría no interesarte jamás y, por otro, descubrís que hasta la cosa a la que ni habías prestado atención puede ser interesante - ¿Qué lo diferencia de la anterior conductora del ciclo, Magdalena Ruiz Guiñazú?

- Yo pregunté lo mismo: no qué me diferenciaba, pero sí por qué yo y no ella. Hay quizás una explicación: el público mayoritario de "National..." es adolescente adulto joven. Entonces, ya que es el único país en el mundo donde "National..." se ve en canal de aire, de hecho soy el tercer conductor del canal, porque los que conducen en otras partes son quienes hacen los documentales. Lo que querían acá era como un referente de la juventud, por así decirlo - ¿Cómo se lleva con el rating?

- Mi relación con el rating es nada, me interesa en la medida que yo pueda conservar el trabajo. Si con 8 puntos (lo que mide promedio "Aventura...") está bien y basta para mantener el laburo, no me importa si el otro midió primero y yo tercero. Pasa que en la tevé hay una tara muy grande, la de la gente que trabaja ahí, que mide la calidad de lo que hace y de su seguridad personal por el rating. Entonces, si el rating es bajo se cuestiona y eso me parece un horror. Además, en general, el buen rating no va de la mano con lo que me gusta ni a palos. Un programa podrá tener 36 puntos y lo más probable es que yo no lo haya visto ni lo vea nunca. Repasando mi historia como televidente, nunca vi programas muy masivos, pero insisto que es por una cuestión de gustos - ¿Mira mucha tevé?

- Es cierto que veo muy poca tele. Veo generalmente con mi hijo algo de dibujos animados, pero de tevé de aire veo casi nada, y de cable sólo una hora y media con el tandem "Los Simpson", "Malcolm" y "Futurama", y una hora de la película de terror del año del moño que pasa Retro.

Además de su labor televisiva en "Caiga Quien Caiga" y "Aventura National Geographic", la vida profesional de Eduardo de la Puente se nutre y apoya en la radio, la música y la literatura. El conductor acaba de editar el libro de ficción "Por qué tardé tanto en casarme" y está por grabar un disco con su banda de rock Tristemente Célebres -¿Hace tevé, radio, escribe... ?

- Tevé, radio, escribir y rockear también, porque tengo una banda (Tristemente Célebres) con la que en dos o tres meses saldremos a las pistas y parece que vamos a empezar a grabar un disco, lo cual me pone muy contento. Toco la guitarra y compongo, somos cinco (dos guitarras, bajo, batería y voz), una formación casi clásica del rock and roll pesado, con temas propios y sonido duro. Componer era una asignatura pendiente en lo espiritual, nunca lo había hecho en mi vida y ahora me largué y está bárbaro. Eso de caer con medio tema a la sala y que a las dos horas haya una canción sonando que hiciste vos en el líving de tu casa, es mágico - Cuénteme sobre su reciente libro "Por qué tardé tanto en casarme".

- Me pone muy contento porque en un punto siento que es como mi primer libro, ya que es ficción pura. Escribí estos cuentos sin pensar en sacar un libro y sólo por diversión, pero cuando pintó el ofrecimiento de la editorial (que finalmente lo publicó) me puse más las pilas. Es una linda veta para explotar, pero es por puro placer personal, porque a menos que seas Gabriel García Márquez, no se puede vivir de vender libros - De todas maneras, más allá de los réditos, ¿No podría dejar de hacer radio ni tevé?

- Es verdad, no podría. A la radio, por lo menos, no podría dejar de hacerla. Sin embargo, escribo desde muy chico y toda mi vida zafé con la escritura. (Télam).