Arte del sur para Buenos Aires

Nadia Guthman y Juan Marchesi han desembarcado con su arte en Buenos Aires. La escultora y dibujante vino desde Bariloche elegida para participar en Estudio Abierto Retiro en Harrods. Mientras que el maestro Marchesi se presentó en el Centro Cultural Borges con gran cantidad de obras, previamente ad

"Habitantes de un laberinto", óleo sobre tela de Juan Marchesi.

Nadia Guthman con sus esculturas suspendidas, transparentes y sugestivas donde el mundo animal se asimila al sentir humano, conformó una estética con la cual esta vanguardista compitió con notable éxito con 500 artistas del país y del mundo.

- ¿Cómo nace esta estética?

- El trabajo en escultura y dibujo con estos temas los vengo haciendo desde chica. En Bariloche expuse varias veces, participé en salones y exposiciones de la región, en Neuquén y General Roca. Aunque nací en Capital, desde los l2 años estoy en Bariloche y me siento más de la zona que de Buenos Aires. Justamente hace años que tenía la idea de venir a exponer en Capital, donde hay mucha actividad artística, siempre me atemorizaba un poco, por esto de estar lejos lo difícil de conseguir información, trasladar obra, hacer contactos... Había que venir a Buenos Aires. Pero me llega una convocatoria como Estudio Abierto, que por primera vez incluyó artistas del interior, además del extranjero. En cuanto a mi propuesta siempre trabajé mucho con varios materiales. Simultáneamente voy tocando diferentes temas, a veces abstractos, otras figurativos. Pero con los animales me pasa algo bastante particular, una empatía que tiene que ver con la energía de uno mismo. Una niña me preguntaba sobre eso y yo le decía, si cuando estaba enojada a veces no se sentía como un lobo o un león, o cuando estaba corriendo no sentía que volaba como un pájaro, ella asentía y me parece que en los niños eso es muy espontáneo. Entonces reúno esas sensaciones que se pueden representar con animales, aunque en definitiva estamos hablando de la gente.

Nadia Guthman se centró en trabajar en tres dimensiones. El dibujo últimamente lo utiliza como estudio de sus formas. Para las obras presentadas en Harrods hizo varios bocetos de animales en diferentes situaciones y después los trasladó al volumen. Así, casi fantasmales en el efecto de iluminación expuso un felino en un ramerío en situación de defensa, un buey con una suerte de perro o lobo en su interior, como enojando, sugiriendo la domesticidad propia del ganado y su sometimiento, aunque también la actitud de furia contenida. Para ella es lo mismo que en la gente, donde conviven las dos sensaciones: poner el lomo para el trabajo, pero con una reacción que muchas veces se vuelve en contra y la enferma. "Es el lobo interior".

- ¿Una asimilación del animal con las actitudes humanas?

- Por eso puse un calificativo de la obra general: Mansedumbre argentina. Porque el sapo, otra de las obras, es una visión irónica con la idea de que el que come y no convida tiene un sapo en la barriga, y este tiene una mosca, con alusión al dinero o la avaricia, y un título casi científico como Bufo avaricus.

"Habitantes de un laberinto", óleo sobre tela de Juan Marchesi.

La artista que expone por primera vez en Buenos Aires, comentó la grata experiencia que tuvo con estas esculturas de animales. "Ya era importante haber sido seleccionada y participar con tantos artistas reconocidos, con más razón cuando solo habían visto las fotos de las obras. Me alentaron de todos lados y se me abrieron posibilidades de exponer en otros lados. Hace poco había hecho una exposición en Bariloche, pero fue poca gente y el contraste con Buenos Aires e total, además de un aprendizaje, porque incluso estuve visitando otra muestras. La sensación en Río Negro es que siendo varios los que estamos trabajando, cuesta mucho superar un techo. Bariloche es una ciudad chica y no hay compradores de arte, siempre que vendí fue a gente de Capital. Y los lugares de exposición no son los ideales. Es diferente en Neuquén y Roca, donde los veo más preparados para que el público local reciba las muestras de artistas. La gente que está en Capital tiene muchas posibilidades, incluso contactos con otros países. La sensación es que primero hay que pasar por Buenos Aires", dice Guthman, que a pesar de las dificultades eligió vivir en Bariloche donde se siente respaldada por la naturaleza y el aislamiento para su trabajo En su obra los materiales conviven con la idea, esta vez fue metal desplegado cuya transparencia y liviandad son ideales para la sugestión del tema, pero también están la madera y la piedra Con la posibilidad de exponer en octubre en la Casona de los Olivera, la espera mucho trabajo. La idea es insistir con el mundo animal y su mensaje tal vez con aves y peces moldeados en esas formas metálicas

Mágicamente sorprendido

Así se expresó Juan Marchesi cuya obra en cantidad se expone en el Centro Cultural Borges, un itinerario de dibujos exquisitos, paisajes, temas universales y la interioridad de los laberintos. Acuarelas, dibujo a pluma, oleos, técnica mixta Un viaje desde Viedma y su paisaje hasta la Capital, donde ya expuso "Pero esta es la primera muestra que hago de tanta envergadura, aquí hay más de 70 obras y loa verdad es que nunca las había visto todas juntas, Eso fue idea de " Yuyo" Noé y Alejandro Puente que vinieron a mi casa en Viedma, vieron los trabajos y de 250 obras eligieron todo esto. Una producción que hice en Bariloche, donde vive mi hijo, y Viedma, durante cinco años. La muestra la armaron estos grandes maestros que para mi son lo máximo. Eran como dos chicos que colgaban los trabajos en el Centro Borges. Fue todo muy emocionante" dice Marchesi que se considera más dibujante que pintor, aunque se consagró en una obra que sobre todo es " un estado de animo" El maestro se levanta al alba, toma mate y pinta o dibuja, luego toma su bicicleta y se va a la costa del río y sigue su trabajo, tal vez recordando su niñez en Buenos Aires y sus escapadas al Tigre donde era remero de un club Después vino el vivir en Bariloche y Roca. En esta etapa de su vida, acaso en su período de mayor reconocimiento, prefiere quedarse en Viedma, con el río y las islas, su mujer y sus clases "Estoy mágicamente sorprendido de esta experiencia, la atención del público, la venta de las obras, pero mucho más por este permanente contacto con maestros como Noé o Puente, sus lecciones, su opinión. Para mi fue pasar un examen para luego seguir trabajando con mis paisajes, porque eso me produce un vuelo espiritual muy grande" subrayó. (J.P.)

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Julio Pagani